La Guardia Municipal (GM) de la ciudad brasileña de Belém do Pará anotó esta semana en sus registros un episodio fuera de lo común.

Ocurrió en la madrugada del miércoles, cuando una patrulla que circulaba por la Avenida Duque de Caxias se detuvo ante una situación inesperada: un niño pequeño, que apenas era capaz de caminar, se paseaba por la acera en compañía de un perro callejero.

En su informe, la GM detalló que los sorprendidos agentes bajaron del vehículo y se acercaron al menor, quien se encontraba descalzo y sin ropas. Los uniformados dijeron que el perro “parecía proteger” al pequeño.

Según informó el diario O Globo, niño y can fueron recogidos por la policía, que continuó por el barrio en busca de los familiares de los “prófugos”. En el camino encontraron una casa con el portón abierto en la calle  Travessa do Chaco.

Al escuchar el sonido de la sirena, los padres del niño se despertaron, abandonaron la propiedad y se reunieron con su hijo. En su declaración ante la policía explicaron que trabajan en un carro de comidas y llegaron a casa ya de madrugada. Se ducharon y cayeron dormidos, por lo que no vieron que el bebé, de apenas un año, se había despertado y salido de casa.

El niño y el perro fueron entregados a la familia.