Negociación colectiva en el sector del medicamento se tensó y hay conflicto en puerta

El Sindicato de la Industria del Medicamento y Afines (SIMA) denunció este miércoles que su rubro “crece exponencialmente” en cuanto a las ganancias, pero que se está “precarizando el trabajo” y se está poniendo en riesgo “la salud de los trabajadores”.

Los empleados del sector pretenden generar avances “sustanciales”, pero señalan que están lejos de acordar. Este jueves habrá una nueva instancia de negociación colectiva en el Ministerio de Trabajo.

En un comunicado, al que accedió Montevideo Portal, el SIMA señala que las cámaras empresariales continúan avanzando “en su modelo de precarización del empleo”, apostando a las tercerizaciones de “sectores claves” del proceso productivo del medicamento, como lo son la logística, depósito, distribución y limpieza especializada en fábrica.

El gremio reclama, entre otros puntos, “el beneficio de alimentación para todas y todos sus trabajadores”.

“En una industria donde la circulación y el contacto con el exterior debe ser de extremo cuidado para mantener las condiciones de higiene necesarias a la hora de fabricar, acondicionar o distribuir los medicamentos, donde las plantas de producción se encuentran en sectores aislados, se hace imprescindible acceder a la alimentación en condiciones dignas, en el lugar de trabajo”, señala el documento.

Según indican, la pandemia dejó al descubierto que esta rama de actividad tiene un alto porcentaje de jefes de hogar con menores a cargo y una extensa jornada laboral, donde la necesidad de contar con horas para el cuidado de nuestras familias se vuelve indispensable.

“Los trabajadores del medicamento trabajaron incansablemente durante para cumplir con el abastecimiento de medicamentos para la población, sin embargo esto no fue tenido en cuenta al momento de negociar un nuevo convenio colectivo”, señala el comunicado.

El SIMA sostiene una vez más que el sector mantuvo un “importante” aumento en la cantidad de medicamentos producidos y el volumen de ventas locales, exportaciones y el precio al consumidor final. Esta producción se genera con la misma cantidad de trabajadores o en algunos casos con menos, lo cual repercute en la salud de los operarios”.

Los funcionarios que se movilizan en la puerta de varios laboratorios por estas horas reparten un folleto que señala: “Mientras usted paga cada vez más por los medicamentos, el salario de las y los trabajadores no aumenta. ¿A dónde van las ganancias?”.