Contenido creado por Ignacio Alcuri
Locales

Círculos viciosos

Naná inventó barrera protectora para relaciones

Naná inventó y registró un dispositivo protector para las prácticas sexuales con contacto bucoclitoriano y bucoanal. Se trata de un círculo de silicona de cierto espesor, con un círculo concéntrico más pequeño y más delgado. "Los hemos probado en el negocio y funcionan a la perfección".

17.04.2009 09:39

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2009-04-17T09:39:00-03:00
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Montevideo Portal

La famosa Naná convalecía de una cirugía de cadera cuando tuvo una idea que prevendría contagios a la hora del sexo oral. Una barrera protectora contra todo tipo de gérmenes, virus y bacterias, informa La República.

Hasta hoy era difícil evitar el contagio cuando se practican algunas variantes de la relación sexual. "Me di cuenta de que el problema que tenían las chicas en mi casa era el sexo oral, por razones sanitarias. Estamos hablando de sexo oral anal y sexo oral clitoriano, prácticas para las que no había medio adecuado de prevención de contagio", dijo al matutino.

Naná aclaró que "el cliente quiere que la chica le haga sexo oral anal a él. Ahora, la cosa no es sencilla: hay problemas de olor, hay posibilidad de contagio". Y agregó que "para zanjar estos problemas, las chicas se ponían un condón en la lengua, pero eso era muy complicado, al cliente no le gustaba y al final la mayoría de las chicas se negaban a esa práctica".

"Yo comprendo que cuando alguien paga, tiene derecho a exigir; pero mis chicas también tienen derecho a negarse". Estando convaleciente, tuvo una idea. "Fue un momento de inspiración. Agarré un lápiz y lo dibujé como pude".

El dispositivo consiste en un círculo de silicona de cierto espesor en cuyo centro hay otro círculo concéntrico más pequeño y más delgado, que estará en contacto con la lengua de un lado, y con el ano o el clítoris del otro. El que está previsto para la relación anal tiene el círculo central un poco más grande.

"Los hemos probado en el negocio y funcionan a la perfección".

Después de tener la idea, "me puse a recorrer todos los lugares que me parecían adecuados para fabricar esto. Fui a una fábrica de globos, también fui a Funsa, pero por ahí me di cuenta de que el material no debía ser el látex, como los condones. Fui a dar a una fábrica de caños y tubos para enfermos, confeccionados en silicona".

"Antes de hacer una matriz gestioné la patente de invención, y sólo después de ese trámite, di con la fábrica adecuada", cuenta. "Después fue el turno de la gestión ante el MSP; hablé con la ministra, quien reconoció que mi invento era una prevención de salud; el hecho es que al cabo de casi un año, tengo la autorización para venderlo".

El responsable técnico de la fabricación, Bruno Baselli, explicó que ya se hizo el trámite como dispositivo de venta libre y ahora se registrará como dispositivo terapéutico. "Si queremos venderlo como dispositivo protector, como barrera contra el Sida y otras enfermedades, hay que hacer un estudio que lleva bastante tiempo y verificar que efectivamente impide todo tipo de contagio".

Está confeccionado en un material que permite el lavado y la esterilización, aunque "por ahora las autoridades sanitarias uruguayas no quieren que sea reusable".

Naná reveló que las regalías como inventora serán donadas a Salud Pública u otro organismo. "A mí me queda la satisfacción de haber resuelto un problema práctico y contribuido a la promoción de la salud sexual".

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