Aldo Cestau, procesado con prisión el jueves por producción de pornografía infantil, acumuló nuevas fojas a su expediente.

La Justicia lo encontró culpable en reiterados delitos de atentado violento al pudor, que amplían su foja delictiva, y suman tiempo a su permanencia en prisión.

Canal 4 informó que la niña de 10 años que aparece en los videos pornográficos realizados por Cestau, que la policía incautó en su computadora, era su propia hija. Cestau subía estos videos a Internet.

La Justicia intenta esclarecer si el hombre mantuvo relaciones sexuales con otras menores involucradas. Tres adolescentes de entre 12 y 14 años deberán presentarse en las próximas horas ante el forense, para confirmar o descartar abusos sexuales.