Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

Más extraño que la ficción

Módulo 10 del Comcar "no se abre hace tres meses", según guardias, que denuncian caos

Presos de uno de los módulos electrificaron en forma casera sus celdas para evitar ataques de otros reclusos. "Es una situación coyuntural", explicaron desde el Ministerio del Interior.

29.01.2019 14:15

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2019-01-29T14:15:00-03:00
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El módulo 10 del Comcar no tiene control por parte de los guardias, que no lo abren desde hace casi tres meses (dejando por lo tanto a los presos sin salidas a los patios) debido a los problemas para manejar los incidentes, según un reporte de Informativo Sarandí.

De acuerdo a los testimonios recogidos por el informativo, hay 549 presos en ese sector con solo dos guardias para custodiarlos. Entre las imágenes obtenidas por el periodista Gabriel Pereyra, se aprecian luchas entre reclusos con armas blancas dentro de las celdas, sin que nadie intervenga, y una turba de presos alrededor, arengándolos.

Según las declaraciones de uno de los guardias, en el módulo 11 hay ex policías recluidos, y por la noche los presos del módulo 10 se escapan (en algunos casos, a través del espacio por el que les entregan la comida) y los atacan con lanzas, piedras y fuego. La situación es tan complicada que los reclusos del módulo 11 lograron electrificar la celda en forma casera para evitar que los otros se acerquen.

Desde el Ministerio del Interior explicaron a Montevideo Portal que si bien los hechos que se narran en el informe son ciertos "hay grises y no todo es tan oscuro", ya que se han realizado algunas intervenciones buenas en un "sector complicado" pero que no es el que tiene los reclusos más peligrosos (que se encuentran en el módulo 8). Es algo "coyuntural", explicaron.

De acuerdo a estas fuentes, son enfrentamientos que "siempre hubo y seguirán existiendo", ya que "el mundo carcelario es un espacio de pujas permanentes donde la convivencia es difícil". Pero "no es la constante ni reflejan la realidad cotidiana", señalaron.

Sin embargo, los testimonios recogidos por Sarandí pintan un panorama de anarquía, en el que los guardias toman distancia cuando se producen líos e intentan disuadir a los reclusos tirando cartuchos.

Los incidentes llegaron incluso a afectar a personas de afuera del centro, ya que en una de las visitas le dieron un puntazo a una mujer que iba a visitar a un preso. Un policía también resultó herido en incidentes ocurridos días atrás.

"De noche salen los presos por las rejas, abren los candados. Hay solo dos policías que no dan abasto", dijo uno de los consultados, que explicó que no se abre el módulo desde hace casi tres meses, pero los reclusos "se escapan por las noches" y recorren el lugar.

Familiares de algunos de los privados de libertad aseguran que no hay defensa ante el ataque de otros reclusos, especialmente los del módulo 10.