"Yo tenía un año más que mi nieto cuando me afilié a la Juventud Comunista, y a él lo voy a buscar a la escuela"

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Las 40

Los límites de la biología

Marina Arismendi cantó Las 40 de Montevideo Portal

"Yo tenía un año más que mi nieto cuando me afilié a la Juventud Comunista, y a él lo voy a buscar a la escuela"

03.12.2013

Lectura: 23'

2013-12-03T00:58:00-03:00
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Por GERARDO TAGLIAFERRO

Su primer regalo de Navidad fueron unas ollitas de plástico de tapa verde, y lo recibió cuando la mayoría de los niños ya saben de sobra quién es Papá Noel y aprendieron a esperar noticias de él junto al arbolito. Pero para Marina Arismendi la Navidad empezó a ser una fiesta cuando el Partido Comunista lo permitió.

Hablamos de 1955, por ahí, año en que se produjo un cambio radical en el destino de los comunistas uruguayos y, quizás, también en el suyo: su padre, Rodney Arismendi, fue designado secretario general del PCU e inició un largo proceso (si es que 25 años puede ser un tiempo largo en política) que transformó, a partir del 1971, al viejo Partido en la principal fuerza organizada de la izquierda, hasta que sobrevino su debacle en 1992.

Marina dice, parafraseando a Hugo Rodríguez, que está imposibilitada biológicamente de ser otra cosa que comunista. Y se apresura a aclarar que esto no tiene relación exclusiva con ser hija de quien es, sino con otros factores que marcaron su vida a fuego, como haber sido miembro de la Juventud Comunista apenas dejó la escuela. Claro que esto también puede pensarse que está relacionado con su apellido.

También puede pensarse lo mismo sobre su acceso a la secretaría general partidaria, en 1992, con la compleja tarea de comandar el buque en un mar embravecido y casi sin tripulación. Como siempre en estas situaciones, es ejercicio retórico plantearse qué hubiera sucedido si su apellido hubiese sido otro. Nunca lo sabremos.

Fue la primera ministra de Desarrollo Social en Uruguay, una cartera creada por Tabaré Vázquez contra la opinión de muchos, incluso la suya, y completó un gabinete integrado por los principales referentes de los sectores frentistas. Hoy es simplemente una afiliada al PCU que tiene la responsabilidad de coordinar el trabajo departamental frenteamplista a nivel nacional y es, además, una ferviente defensora de la candidatura del ex presidente.

Es también maestra, una señora coqueta que pide al fotógrafo que elija las mejores fotos y una abuela que va a buscar a su nieto a la escuela. Un nieto que ya casi tiene la edad que ella tenía cuando tuvo su primer carné de la UJC, pero sospecho -solo sospecho- que ella no se lo cuenta.


1) ¿Va a ser candidata a vicepresidente?
No, es una cosa loca esa.

2) ¿Es una propuesta del Partido Comunista?
No, de nadie es una propuesta. Yo me cruzo con compañeros y compañeras muy queridas que me dicen "tenés que ser candidata". "Sí, claro, te quiero mucho", y ya está. No hay ninguna propuesta, nunca fue planteado. Danilo (Astori) habló de un perfil que debería tener un candidato a vicepresidente y entonces buscan a ver quién encaja en él. Hay gente que se mira al espejo y se ve presidenciable o vicepresidenciable, yo no sufro de eso. Tengo dos defectos para el Uruguay y la época actual que pesan: mujer y comunista.

3) ¿Usted tiene candidato o candidata a vice?
Bueno... el Frente Amplio no lo tiene todavía.

4) Pero le pregunto a usted.
(Piensa) Depende de muchas cosas. Hay compañeras y compañeros... (Se ríe) No es momento. El fin de semana tenemos congreso (N de R: la entrevista fue realizada en la semana previa al Congreso del FA) y tenemos que salir felices y contentos con nuestros dos precandidatos y después veremos.

5) ¿Usted está entre los frenteamplistas que creen que la elección está ganada?
No. Siempre hay riesgo de perder. Hay riesgo, primero, de creerse más fuerte de lo que uno es, de no valorar las dificultades que existen. Un tercer gobierno del Frente tiene que superar a Tabaré y a Pepe. Tabaré, que es mi candidato, tiene que superarse a sí mismo y eso todavía es más desafiante.

"Hay gente que se mira al espejo y se ve presidenciable o vicepresidenciable, yo no sufro de eso"

6) En la anterior elección, luego de cinco años de gobierno de Vázquez, muchos frentistas hablaban de la necesidad de "un giro a la izquierda". Hoy se escucha algo similar. ¿Se necesita un giro a la izquierda?
Depende de lo que se entienda por izquierda. Yo creo que éste es un gobierno de izquierda y que el gobierno de Tabaré lo fue. Es un gobierno del Frente Amplio y por lo tanto es de izquierda. Más que de un giro a la izquierda, a mí me gusta hablar de profundizar la transformación social, lo que implica que podamos erradicar totalmente la extrema exclusión, que podamos llevar adelante medidas que acorten la brecha, ampliar una matriz productiva... ahora, hay que disfrutar también de lo que ya hemos conquistado. Por ejemplo lo que hemos avanzado en la matriz energética: yo disfruto mucho cuando veo los molinos. Disfruto doblemente: como uruguaya y como frenteamplista por lo que significa el desarrollo energético, pero también como bruja que soy porque me acuerdo que se me reían en la cara cuando discutimos el marco regulatorio energético y yo informé en minoría y hablaba de los molinos, de la biomasa, de la cáscara de arroz como fuentes de energía. Entonces... giro a la izquierda... yo creo que profundizando en estas cosas es como vamos profundizando la democracia, que es lo que se plantea el Frente.

7) Hace poco dijo, hablando sobre su relación con Vázquez: "Soy una persona que parto de la base de que la lealtad incluye necesariamente avisarle al otro cuando se va a desnucar". ¿Le tocó vivir esta situación con él?
Bueno, hemos tenido diferencias grandes. Para hablar de una que todo el mundo menciona: el tema del aborto. Pero es un tema que venimos discutiendo desde el año 94 con él. Fue y planteó el tema en Maldonado, en aquella campaña electoral, y yo le dije: "¿No se te ocurre ningún lugar mejor que Maldonado donde decir esto?" Porque ahí teníamos un centro feminista con mucha fuerza, fundamentalmente del Partido Socialista y del Partido Comunista. Casi se lo comen. Ese es un tema, pero hay otros: recuerdo la discusión sobre la Ley de Educación, el Presupuesto. Hay gente que dice que a Tabaré no se le puede decir nada.

8) Está diciendo que usted sí lo ha hecho, tiene ese nivel de confianza con él.
Sí, pero no es un problema de confianza, sino de lealtad. Si a mí me parece que hay una cosa que está mal se lo tengo que decir. Me dará o no la razón.

9) Fue ministra de su gobierno, y a uno le queda la impresión de que el Partido Comunista tenía más diferencias con Tabaré que las que podía tener Marina Arismendi.
Sí... es probable. También hay maneras distintas de abordar las diferencias. Yo estoy formada en un Partido en que las diferencias entre compañeros se planteaban al oído. A veces me lo cuestiono, y más en esta época: hasta dónde, cuando se trata de temas que andan mal, el compañerismo se convierte en complicidad. Los comunistas tenemos un peso por el cual responder, y creo que está bien que lo hagamos, que es nuestro apoyo a la experiencia socialista en el Este de Europa. Y yo hay veces que veo cosas y digo: por acá se derrumbó el socialismo, con éste tipo de elementos y cosas que suceden, también en silencio. Hasta dónde el problema no pasa porque la gente no habló a tiempo a veces.

10) ¿Cuál es su encuadre hoy en el Partido Comunista?
Soy miembro del Partido, pago mi cotización, leo la prensa partidaria...

11) ¿Estuvo fuera del Partido en algún momento?
No, tendría que nacer de nuevo, seguramente.

12) Lo lleva en los genes.
Sí, no tanto en los genes por lo que se pueda pensar de la herencia, pero muchas veces he dicho -y se ha malentendido- que tengo imposibilidad biológica de ser otra cosa. Y creen que es por un problema de herencia, pero estoy citando a un maestro muy querido que hoy no tenemos con nosotros, Hugo Rodríguez, que decía eso mismo cuando se dio la crisis del Partido. Y tiene que ver más que nada con que uno piensa y actúa así en la vida, no tiene otra posibilidad, y lo nota fundamentalmente cuando se encuentra con gente que ya no está en el Partido, pero que mantiene esa forma de responder ante la vida.

13) ¿Hay clientelismo hoy en el Mides?
Yo sé que la pregunta viene por algo que yo planteé una vez. Hablé de medidas que se habían tomado en las oficinas, un cambio de compañeros y compañeras en las oficinas del Mides, que era bien democrático eh, abarcaba a diversos sectores del Frente. No fue que eran todos comunistas y de repente se sacaron y se pintó todo de verde. No es así. No fue solo comunista y la barrida fue pareja. Pero no la comparto.

14) Saquemos la palabra clientelismo: ¿se actuó de acuerdo a cuota política?
No. Yo creo que se actuó de acuerdo a determinadas afinidades personales, que las entiendo pero no comparto. Las entiendo porque creo que uno cuando está gobernando se siente obviamente más seguro si tiene ese "entorno cálido". Ahora, ese entorno cálido es muy peligroso. Es bueno cuando uno tiene un equipo que le discute y le critica y cuando la cosa se pone difícil se va al local de enfrente a discutir sin jerarquías. Entonces eso a uno le hace bien como jerarca.

"Hay gente que dice que a Tabaré no se le puede decir nada. Yo lo he hecho, por un tema de lealtad"

15) Me da pie para que le pregunte por aquel tema del ingreso al Mides de su yerno, de los padres de su yerno...
(Interrumpe) No, no, el padre no tenía nada que ver con el Mides pobre, fue chofer de mi padre durante muchos años. Ahora, el candidato a yerno -como yo le dije en aquella oportunidad y que perdió la candidatura, fue un precandidato- tampoco se quedó en el Mides. Entró propuesto por la Juventud Comunista, como el que está hoy al frente del INJU -el licenciado Matías Rodríguez- entró por una propuesta unánime de todas las juventudes del Frente. En el caso de mi precandidato a yerno, dio un concurso y lo ganó, y hoy no está más en el Mides.

16) ¿Entró por concurso? ¿En aquel momento?
No, en aquel momento no teníamos a nadie. "Los 33", como les llamábamos a los que entraron por contratos PNUD, todos concursaron y algunos quedaron y otros no. En este caso quedó, y en el caso de su madre, que es abogada, está hasta el día de hoy, es la que está al frente de Jurídica del Mides, por mérito propio. Si yo hiciera esas cosas mis hijas vivirían mejor de lo que viven, y trabajarían en trabajos mejores que los que tienen.

17) ¿Estuvo mal el ex ministro Venegas en cobrar el subsidio por el cargo que desempeñó de manera inconstitucional?
Yo no tengo elementos... no estaba cerca del problema. Creo que fue un error gravísimo, colectivo, aunque en primer lugar es personal, el tema de la ciudadanía. El error empieza en la candidatura en la lista, no haber revisado. Yo tampoco lo sabía, pero esas cosas se tienen que chequear.

18) ¿Usted cree que él no sabía que estaba impedido?
No, él tenía la ciudadanía pero no tenía el registro... creo que hubo un error de parte de él. ¿A quién se le puede ocurrir que alguien haga eso a propósito? Hacerlo a propósito sería decir: "lo que yo quiero es invalidar la lista". Es medio absurdo.

19) ¿En qué se diferencia este Partido Comunista de hoy del que emergió de la ruptura del año 1992?
En que tiene más gente nueva, por ejemplo. Los que venimos de antes somos una minoría, mucha gente que estuvo presa ya no está viva. Es un partido que está en otro siglo, con un gobierno del Frente Amplio. Salimos del estallido de la crisis en el 92 replanteándonos si había sido válida la concepción de defensa, avance y profundización de una democracia avanzada, en el marco de un mundo unipolar. O dicho de otra forma: en el marco de un mundo en el que no existía la contraposición capitalismo-socialismo a escala mundial. No era menor el replanteo. Creo que el planteo de la democracia avanzada como vía de aproximación al socialismo es correcto y sigue vigente. Ahora, después en concreto qué significa cuando eso se baja a tierra, ahí es donde surgen los matices y a veces más que matices. A ver, antes no teníamos un debate sobre si había que dar un giro a la socialdemocracia o hacia la izquierda. Lo digo entre comillas y con un tono de sarcasmo que después se lo tiene que poner usted, porque lo que importa no es cuántas "r" le pongo a la palabra revolución. Lo que tenemos que elaborar los comunistas hoy es una perspectiva para el Uruguay de los próximos quince, veinte años, del próximo fin de siglo.

20) ¿El ex secretario general del Partido, Jaime Pérez, tenía algo de razón?
Siempre tuvo algo de razón, todos tuvimos algo de razón.

21) Me refiero a su planteo del año 1992, de construir otra cosa, que le valió durísimas críticas de algunos de sus hasta entonces camaradas.
Pobre Jaime... no es un momento para ir para atrás así, no creo que sea correcto. Pero creo que el gran error que se cometió por la dirección del Partido en aquel momento fue despegarse del sentimiento, de eso que los comunistas tenemos, que seguimos teniendo aun los que no están más en el Partido desde el 92. Entender que no se puede plebiscitar -como era el planteo- la vida misma de cada uno de nosotros. Lo pongo en términos extremos porque así estaba planteado: el cuestionamiento a lo que fuimos, a lo que éramos, que además en última instancia era porque se había caído aquello. Porque además uno miraba la realidad de otros partidos comunistas y el nuestro podía contar éxitos en su estrategia mientras los otros contaban errores. El PCU tuvo aciertos en cosas que no eran la postura del movimiento comunista: el apoyo a la revolución cubana, el relacionamiento con el Che, la formación de frentes. Las divisiones y los problemas de otros partidos comunistas de la región empezaron mucho antes de la caída del socialismo real. Después del estallido de la crisis nosotros sostuvimos y sostenemos hasta el día de hoy -en debate, es cierto- que en realidad la crisis de nuestro partido no fue consecuencia sino que estaba enmarcada en la crisis de la experiencia socialista. En Brasil se dividió el partido antes, en Venezuela están los que se fueron a la guerrilla y los que se quedaron, en México se diluyó en un partido bastante socialdemócrata para su época y desapareció hasta el nombre, mucho antes de lo de la Unión Soviética. Y podemos seguir.


"A veces me cuestiono hasta dónde, cuando se trata de temas que andan mal, el compañerismo se convierte en complicidad"


22) ¿"Socialdemocracia" sigue siendo tan mala palabra para los comunistas como era hace treinta años?

Bueno, como dicen los jóvenes comunistas: mis sueños se siguen llamando revolución. Sin embargo la socialdemocracia europea jugó un papel muy importante en la solidaridad con Uruguay durante la dictadura. Y nosotros supimos agradecerlo y resaltarlo.

23) Pero una cosa es agradecer la solidaridad y otra la opinión que se tiene de un sistema o de una realidad.
Bueno, no es el horizonte de los comunistas. No es. Pero obviamente, si queremos verlo en la vieja terminología que teníamos previo a la dictadura, podemos decir que en Uruguay vivimos en una sociedad capitalista, no cambiaron las relaciones de producción y lo que estamos haciendo es profundizando la democracia hasta sus límites, como decía el Partido antiguamente.

24) Si bien es un término asociado a la realidad europea, ¿podría decirse que hoy Uruguay vive en una socialdemocracia?
Yo creo que no. Nosotros supimos encontrar para nuestro proceso, que es único, es peculiar, un nombre que es "profundización de la democracia". Y cuando decimos esto no estamos hablando de democracia en los términos civiles -elecciones, división de poderes- sino del hecho de apropiarse de las políticas, de la participación popular. Lo más grave que nos puede pasar es que eso no exista. Hemos hecho cosas formidables desde el gobierno, pero si no logramos que la sociedad entienda que es su proceso, su transformación y no se apropia y empuja, no estaremos haciendo lo que debemos. Ahí hay un tema muy importante para un tercer gobierno.

25) ¿Estos dos gobiernos del Frente Amplio son, en la perspectiva del Partido Comunista, una etapa en el tránsito hacia el socialismo, como lo podían haber sido hace veinticinco años?
Claro, pero nosotros lo pensábamos en abstracto. Para usar términos marxistas, las categorías en la concepción del mundo son abstracciones. La belleza es una abstracción, después ella se concreta para usted de una manera distinta que para mí. El tema es cómo confluyen esas concreciones en un proyecto común. Entonces, las cosas que yo pensaba cuando estaba en la juventud comunista no son las mismas que hoy porque pasaron muchas cosas y seríamos absurdos si no lo entendiéramos. No me gusta decir "el mundo cambió"... me parece una afirmación banal, por no decir boba, porque el mundo cambia siempre. Cuando yo era niña no tenía televisión porque no sé si había, pero en todo caso al Uruguay no había llegado, y mucho menos a mi casa. Entonces vamos por ese camino, en otro mundo y en otro Uruguay.

26) Entonces los gobiernos del Frente Amplio siguen formando parte de ese proceso que conduce... ¿a dónde? ¿Al socialismo?
Debería conducir a un avance en democracia, y para los comunistas es parte de ese proceso. Si no fuera parte de ese proceso estaríamos en otro lado. Seguimos pensando en eso.

27) ¿Qué es ser comunista en el año 2013?
En términos generales y abstractos es lo mismo que cuando eran un par de cientos en el Uruguay y soñaban con una sociedad, como se decía antiguamente, "del pan y de las rosas". Una sociedad donde la gente viva mejor, donde decíamos "el hombre sea hermano del hombre". En aquel momento decíamos "el hombre", no decíamos "el hombre y la mujer". Creo que es eso, es seguir pensando que la sociedad puede transformarse de tal manera que realmente las diferencias que existan sean las que nos distinguen a cada ser humano en particular, y no estén dadas por dónde uno nació, por clase social o posesiones materiales.

28) Su padre es considerado uno de los principales teóricos del comunismo en América Latina en la segunda mitad del siglo veinte. ¿En qué se equivocó?
Creo que su principal defecto fue su incomprensión o los errores que cometió en la caracterización de la gente, de los "cuadros" como decíamos nosotros. Creo que es un defecto que siempre tuvo. No acertaba, tenía dificultades para caracterizar a las personas en función de los roles que después se les adjudicaban por parte del Partido. Fue un hombre con un gran talento político, que analizó la realidad uruguaya con cabeza marxista. Algunos dicen que no, (Gerardo) Caetano por ejemplo. Él cuestiona la parte teórica y destaca al político, pero yo creo que no, porque si bien el estalinismo cayó, la concepción de aplicar "la raviolera" a la realidad se mantuvo. Y él reivindicaba un camino propio para el Uruguay.

"Como dicen los jóvenes comunistas: mis sueños se siguen llamando revolución"


29) Sé que no habló demasiado con su padre, pero ¿alguna vez le contó sobre aquel célebre episodio -registrado en una foto- en el que fue el único que no aplaudió un discurso de Fidel Castro en La Habana, durante la conferencia de la OLAS en 1967?

No, no, personalmente no. Pero esa es una cosa como emblemática para los comunistas uruguayos. Está la foto: él está de brazos cruzados.

30) Quiso marcar claramente una distancia con un discurso a tono con las resoluciones de aquella conferencia, sobre la necesidad de la lucha armada en el continente.
Claro, era marcar claramente: estamos juntos, somos hermanos, nos apoyamos, pero no estoy de acuerdo contigo. Y eso no implica no ser solidario contigo y respetarte. Arismendi siempre ponía el ejemplo del hermano de Lenin, que hizo el atentado contra el zar. Él dijo: "éste no es nuestro camino", pero quería a su hermano y lo defendía. Entender eso es clave para los comunistas.

31) ¿Tiene secretos de su padre?
No.

32) ¿Él los tenía?
Seguramente. Creo que todos los comunistas que murieron se han llevado consigo a la tumba una parte de la historia.

33) En una entrevista que le hice en el año 1996 le pregunté si sabía por qué los militares liberaron a su padre cuando lo apresaron en 1974, y usted me contestó que no sabía. ¿Hoy me va a decir lo mismo?
Está una versión de la dictadura, de que hubo un canje por carne. Eso descartado absolutamente. Conozco más de cerca, porque lo hizo la RDA (República Democrática Alemana), el intercambio de (Luis) Corvalán (ex secretario general del Partido Comunista chileno) por algunos presos en la Unión Soviética que tenían que ver con espionaje yanqui o algo así. Podríamos decir lo mismo: mataron a tantos chilenos y por qué lo liberaron a él. A Arismendi lo llevan preso en un momento particular, yo creo que un par de años después hubiera seguido la suerte de todos los demás dirigentes del Partido. El compañero de mi mamá, Guillermo Israel, 50 años de pareja con mi madre, también fue expulsado del país como extranjero indeseable, le salvaron la vida en realidad. No sé... después aparecen los escritores que abren supuestos archivos que dicen que... pero después vienen los que los contradicen sobre los mismos documentos.

34) Siendo su hija, más allá de la distancia que podía existir entre ambos, ¿realmente no sabe qué sucedió?
No. Recuerdo claramente a un integrante de la dictadura diciendo en televisión, después que lo expulsaron -porque eso fue lo que sucedió- que a Arismendi lo cambiaron por el fichero (de afiliados al PCU). Esa es otra versión que hay. Y este hombre decía: "si usted es comunista y todavía no lo fueron a buscar, espere que ya van a ir". Ahí se monta toda una leyenda tendiente a desmoralizar a los comunistas, cosa que no logra, y también era parte de la política de la dictadura. Supongo que la URSS habrá hecho alguna negociación, como después se hizo por Corvalán. Arismendi tenía una entrega total a la causa... que desde un punto de vista puede ser cuestionable, ojo. Siempre cuento que le informé que estaba embarazada de mi primera hija a través de un papelito que le pasé al estrado en un acto, y que (José Luis) Massera, que estaba a su lado, le dijo: "mirá que para ser abuelo hay que ejercer". Pero para nosotras, las hijas, eso estaba bien y era lo que tenía que ser. Para mí el resultado del XIV Congreso del Partido Comunista (en 1955), en el que se sale de toda la época de (Eugenio) Gómez y se da el cambio más grande, significa ollitas verdes de plástico en un árbol de Navidad.

"Creo que el principal defecto de mi padre fueron los errores que cometió en la caracterización de la gente, de los ‘cuadros' como decíamos nosotros"

35) Esa anécdota usted la cuenta en el libro "Ministras" de Blanca Rodríguez.
Fue mi primer regalo de Navidad, porque antes no existía. Eso es para entender lo que era la vida cotidiana en ese aspecto.

36) ¿Qué es Cuba hoy?
Es una sociedad que pelea por mantener las conquistas del socialismo y que está en un proceso teórico y práctico muy interesante. El Convento Belén, en La Habana, trabaja fundamentalmente con adultos mayores y con personas con discapacidades. Ahí hay gente del Partido pero también de las distintas religiones, y nosotros en el Mides trabajamos mucho en convenio con ellos, y quien está al frente, Nelson Aguilar, me decía: "Tú te darás cuenta el desafío que fue hacer entender que después de 30 años de políticas sociales universales teníamos que hacer políticas focalizadas".

37) Muy probablemente Michelle Bachelet será electa nuevamente presidente de Chile. ¿De quién se siente más cerca, de ella o del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro?
Me siento muy cerca de Bachelet porque nos sentimos muy cerca de los chilenos. También porque tuvimos vínculos estando Tabaré en el gobierno. Pero no sé, son procesos distintos. Venezuela es un país donde los partidos, todos los partidos, se fueron al diablo. Una sociedad espantosamente partida con unos extremos de riqueza y de pobreza que no tienen nada que ver con el Uruguay, y donde surge este fenómeno socialmente extraño con la figura de Chávez. Una figura que surge con un perfil de izquierda, pero si hubiera sido con un perfil de derecha y populista hubiera calado también, por esa no existencia de partidos.

38) Muchos decían que el fenómeno se agotaba en Chávez. ¿Qué cree usted?
No sé. Ahora estoy más lejos. A Maduro lo conocí parcialmente como presidente del Parlamento. Para una mentalidad uruguaya el tema del "pajarito" y cosas por el estilo... a mí me cuesta. Pero a la gente venezolana le encanta, o a un porcentaje realmente importante. Eso más allá de lo que se hizo por mucha gente que existió a partir de Chávez. Estuve en Venezuela en marzo del 2001 y fue un mes antes del intento de golpe contra Chávez, y uno veía a las viejitas con sus sillitas de playa, sentadas frente al Palacio Miraflores, con un cartelito que decía: "Dejen trabajar en paz al hombre".

39) Cuando en la década del 60 o principios del 70 se imaginaba el siglo veintiuno, ¿cómo creía que iba a ser el mundo?
No, no pensaba en el siglo veintiuno. Estaba todo más cerca. Yo me casé a los 18 años, tuve mi primera hija a los 23 y ya estaba recibida. Al poco tiempo mi marido preso... todo pasó mucho antes. Volví del exilio con treinta y pocos años, ahora veo gente de esa edad y me parecen unos nenes. Nos sentíamos muy grandes aunque éramos chiquilines, viéndolo con los ojos de hoy. Yo tenía un año más que mi nieto hoy cuando me afilié a la Juventud, y a él lo voy a buscar a la escuela.

"Todos los comunistas que murieron se han llevado consigo a la tumba una parte de la historia"

40) Recién le preguntaba sobre la principal equivocación de su padre. ¿Y la suya?
El problema es pensar en superlativo... "la más" (se ríe). Creo que fue el pensar que iba a ser más fácil la reconstrucción del Partido. No sé si pensar, ni siquiera sé si nos lo planteamos en términos de pensar, simplemente había que hacerlo. Siempre digo que en la vida uno dice que sí o que no, no le puede echar la culpa a las circunstancias, en última instancia uno dijo sí o no, y yo me lo aplico. Entonces quizás fue haber seguido en aquel momento con la bolsa al hombro, que me cayó y dije que sí. Quizás fue eso... pero veremos.


Montevideo Portal / Gerardo Tagliaferro
Fotos: Juan Manuel López
Por comentarios: tagliaferro@montevideo.com.uy