El Ministerio de Economía y Finanzas anunció este jueves un acuerdo entre el ministerio, los emisarios de las tarjetas de crédito y de débito y las cámaras comerciantes para instaurar la baja de los aranceles de las tarjetas.

Según dijo Pablo Ferreri, subsecretario de Economía, en diálogo con la prensa, este acuerdo implica "cuatro o cinco aspectos centrales". El primero, dijo, es la rebaja de los aranceles que vuelve "más económico para los comerciantes el uso de estos medios electrónicos".

En segundo lugar, se buscará una reducción de la dispersión, "es decir la diferencia entre el que se le cobra menos y el que se le cobra más"; esa diferencia genera, sostuvo Ferreri, un problema para los comerciantes menores.

El tercer punto, comentó, es la disminución de los plazos para entregarle el dinero a los comerciantes cuando el pago se hace con tarjetas de débito, además de estar trabajando para "homogeneizar" todas las liquidaciones de las tarjetas para tener un mayor control por parte de los comerciantes.

"Y el último aspecto sensible tienen que ver con la posibilidad de los pequeños comerciantes de acceder a los esquemas de promociones, que a veces se aplican en los grandes comercios y que dejaban a los pequeños al margen", explicó el jerarca.

La rebaja de los aranceles se dará de forma "progresiva", anunció el MEF, en la medida en que aumenten las transacciones de este estilo. Se espera que los aranceles de las tarjetas de crédito bajen hasta el 2, 25 %, mientras que en las tarjetas de débito la cifra disminuya al 0, 85%.

No obstante, a los dos meses de firmado el acuerdo se concretará una reducción inicial para las empresas de reducida dimensión económica (los Monotributistas y los contribuyentes incluidos en el Literal E), que llevará el arancel máximo del 1,5% vigente a 1,3%.