Seré curioso

Entre El Peluca y El Pistola

Lale de La Teja en Seré Curioso: "Ayudar a un pibe es mucho más que plata, más que todo"

Alejandro Ferreira no tiene empleo formal, pero se dedica a ayudar a otros jóvenes del barrio con ropa o comida. Ahora tiene una obsesión: abrir un merendero.

04.10.2018 06:18

Lectura: 32'

2018-10-04T06:18:00-03:00
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Por César Bianchi

@Chechobianchi

 Fotos: Juan Manuel López

                Es altamente probable que si te cruzás con el Lale de nochecita, cruces de vereda. Capaz que nada que ver, pero por las dudas, para qué regalarse, ¿no? Tiene el pelo cortado a lo plancha, el nombre de una banda punk tatuado al costado de su cabeza, el número 48 debajo de un ojo y un corazón sutil debajo del otro ojo, pero también tiene tatuada una hamburguesa Burgy (ni siquiera Shneck), un tetra-brik de vino Faisán rosado y varias alusiones a Progreso, el club del barrio. Porque Lale es Lale de La Teja. Tanto, que si lo llaman Alejandro seguramente no se dé vuelta.

                Lale, de 22 años, apenas recuerda a su mamá, que falleció de un tumor cerebral cuando él tenía 6. A su padre nunca lo conoció. Quien se hizo cargo de él y sus dos hermanos fue la abuela materna Hilda -la Iaia, Mary para todo el mundo-, una heroína que le transmitió valores. Ella lo hizo de Progreso, lo alimentó y le enseñó varias cosas, entre ellas, que es un pecado ver a otro pasar hambre y no hacer nada, y que "las botas" son mala palabra. Lale curtió -curte- "esquina" pero siempre tuvo claro que él no estaba para meterse en líos, sobre todo porque no hay derecho a hacerle mala sangre a la Iaia.

                Toda una celebridad en redes sociales, Lale, un frustrado futbolista, encauzó su vida siguiendo el ejemplo del tejano Daniel "Pistola" Marciscano, expresidente de Progreso, solidario hasta el paroxismo y homenajeado en el pasado concurso de carnaval, para aplauso de la barriada. Lale era uno de los tantos botijas que comieron o tomaron un helado gracias al Pistola. Hoy, él quiere retomar su legado en la zona. Para eso lidera el grupo de  amigos Entre Todos, próximamente una cooperativa con merendero, que lleva ropa donada a los más necesitados, y el movimiento Fe, donde acompaña a Fabricio Edwin en otra quijotada: llevarle fútbol y guiso a niños y adolescentes con demasiado ocio encima.

                Alejandro Ferreira -eso dice su cédula- no tiene empleo formal, se las rebusca haciendo changas, principalmente cortando leña o céspedes ajenos, pero dedica gran parte de su semana a los demás. Conoció a José Mujica, se hizo amigo de Daniel Martínez, asegura que hace poco Carolina Cosse aludió a él y él no sabía quién era ella, y le ha dedicado tuits a Lacalle Pou invitándolo a comer un guiso, a pesar de no poder convidarlo con champán.  Pero este gurí, que a primer golpe de vista parece la reencarnación del "Peluca" Valdez -¿se acuerdan del líder del Movimiento Plancha?-, no quiere saber nada con la política y mucho menos con dedicarse a eso. Algunos tuits o la decisión de acudir a una entrevista con el intendente vestido con la camiseta de Progreso, traje por arriba y las medias por sobre el pantalón son "parte del personaje", dice.

                Porque Lale es también, un personaje, lo sabe y lo explota. Te invito a leer esta entrevista para conocer al personaje Lale de La Teja, y a la persona Alejandro Ferreira.

                Es altamente probable que después de conocerlo un poco más, si te lo cruzás de día o de nochecita, quieras acercarte a darle un abrazo.

 -Abandonaste los estudios en tercero de liceo. ¿Por qué?

 -Me creía superhéroe, preferí la joda, la esquina con amigos y no le hice caso a mi abuela.

 -¿Te dejaste llevar por las malas juntas? ¿Hiciste cualquiera?

"El Pistola una vez nos llevó a 20 gurises de La Cachimba a un bar en 18 y se fue sin pagar. A veces mi abuela me mandaba a hacer un mandado y yo me iba a buscarlo, porque me llevaba a tomar un helado. Era un protector de toda la gurisada"

 -No, siempre en la mía, las malas juntas nunca. Siempre hay malas juntas, más en un barrio como acá, a veces los amigos que tenés van para otro lado, pero yo siempre tuve consciencia de qué hacer  y qué no. En la esquina que nosotros paramos, sólo yo y otro más estamos afuera, los demás están muertos o en cana.

 -O sea que no hiciste las cosas del todo bien como para seguir con los estudios, pero tampoco tan mal como para terminar como otros amigos que frecuentabas en la esquina...

 -Ahí va. Mi abuela siempre dice que prefiere un nieto que capaz que no estudie, pero ta, que encare. Y yo encaré pila, ahora más que nunca.

 -¿Qué viene a ser que "encarás"?

 -A veces estás rodeado... no de gente mala, pero sí de gente que roba o eso, es más fácil pudrirse. Y tener cabeza para no pudrirme fue lo mejor que hice. Tampoco quería alejarme, porque eran los gurises con los que yo me había criado y todo, cuando éramos chicos jugábamos a la pelota y después crecés y es otra cosa.

 -¿Y qué hacías ahí en la esquina?

 -Me fumaba un porro, tomaba un vino, escuchaba rock.  Y cuando caía la noche, yo seguía en la mía y ellos en la de ellos, me venía para casa o si tenía novia, la iba a ver. Y ellos también fueron de cuidarme, o de saber que yo no estaba pa' esa, y no me incitaban. Ellos mismos, los mayores, los más zarpados, decían: "El Lale no, el Lale está pa'otra". Yo de chico usaba rastas y me juntaba con gurises con visera y cosas así, y después cuando aparecía otro medio raro, ellos decían: "Si nosotros tenemos al Lale, ¿para qué vamos a prejuzgar?" Porque, a veces, si no te vestís como ellos, se prejuzga. Pero ta, la ropa es ropa.

 -A vos no sólo se te juzga por la ropa, también por las tatuajes, el corte de pelo... Contame qué tatuajes tenés, porque algunos llaman la atención. Hasta en el rostro tenés tatuajes.

 -Acá (antebrazo derecho) tengo un caja de vino, es uno de los pocos que no tiene significado. Me lo hice porque ta (tiene tatuado un Faisán rosado dulce). Me lo hice por hacer. Me gusta más el tinto que el rosado, pero había tinta naranja y ta. Acá (en el pecho) me hice esta hamburguesa Burgy por el Pistola (Daniel Marciscano) porque de chico nos daba de comer hamburguesas Burgy a todos los gurises. Con este tatuaje mucha gente me descansó y no sabe lo que significa para mí... Acá (arriba de la hamburguesa, en el pecho) tengo el nombre de Viejas Locas por el Pity (Álvarez), de Progreso tengo pila, acá (en la mano izquierda) tengo el escudo, tengo un corazón acá, tengo una canción de la barra acá, de todo. Y acá (en la cabeza) me tatué Flema, que es una banda de punk.

 -¿Y el número 48 abajo del ojo izquierdo?

 -Es un número que me sigue de chiquito. No sé cómo explicarte, pero las cosas más random, buenas y malas, está el 48. Pero sin fines de lucro. Ha salido, pero nunca le jugué. Siempre jugué al fútbol de chico, llegué a jugar de volante por izquierda, y yo pedía el 48.

 -Fanático de Progreso, el cuadro del barrio. ¿Quién fue clave en esa adhesión, en vez de hacerte hincha de Peñarol o Nacional?

 -El barrio y mi abuela. Ahora los gurises de hacen de Peñarol o Nacional, pero yo cuando era niño, lo normal era hacerte de Progreso, el cuadro del barrio. Pasa que Progreso no era tanto fútbol, estaba el merendero, entonces había mucha gente que iba al club, pero no iba a la cancha, porque era muy social Progreso. Familiarmente me hizo hincha mi abuela, yo vivía a dos cuadras del Paladino, entonces salía y estaban los gurises en la esquina, salían camiones para todos lados. En ese momento estaba La Reina de La Teja, y La Reina te sacaba mínimo cinco camiones para todos lados. Íbamos al Teatro de Verano y era impresionante, cantábamos como barrabravas. Me acuerdo que hasta cuando se recibió Tabaré (Vázquez), de doctor, sacaron camiones y cantaban como barrabravas. Yo sabía que era importante, pero no lo junaba.

 -¿Quién era el "Pistola" Marciscano? En Twitter pusiste que era "un sabio, un millonario sin un mango"...

 -Es un pedacito de la canción que le dedicó Tabaré Cardozo. Tengo miles de anécdotas. Una vez nos llevó a 20 gurises de La Cachimba del Piojo, de La Teja, a un bar en 18 y se fue sin pagar. Nosotros éramos chicos, pero cuentan que no pasó nada porque después consiguió donaciones, pero en el momento estaban re quemados en el restorán. Nosotros todos sabíamos dónde estaba él, paraba a dos cuadras de La Cachimba o estaba en un bar, ahí siempre estaba él. A veces mi abuela me mandaba a hacer un mandado y yo me escapaba y me iba a buscarlo, y siempre me llevaba a tomar un helado a La Gioconda. Era como un protector de toda la gurisada del barrio. Yo no lo vi, pero mucha gente lo vio sacarse sus propios zapatos para darle a un gurí, porque antes los pibes no eran de las marcas.

 -¿Qué has hecho por el club, además de ir a la cancha a alentar?

 -Pila de cosas. Mismo ahora estamos haciendo un festival para ayudar a los juveniles, pintamos las tribunas. Recién ahora el club está bien porque vino Fabián Canobbio, que es de la casa, y lo quieren, pero antes los dirigentes siempre fueron malos.

 -Y tenés al presidente de la República de tu lado, porque le tiran los colores...

"Yo pongo en el Twitter que a qué barrio quieren que vayamos, y ahí donde se precise ropa, vamos. Buscamos gente conocida en cada barrio, porque no es lo mismo ir con un conocido, que mandarte así. Si vas a un barrio con un conocido, ya generás un vínculo"

 -Le tiran sí, pero ta... yo siempre digo que a ver cuándo pone la tarasca. Es el momento. La última vez que puso guita fue cuando los 100 años, hace dos.

 -Vos te has hecho conocido por dar una mano a quien lo necesite, por tu solidaridad. ¿Cómo nace esa inquietud en vos?

 -Mi abuela es la que va para el cante, agarra los gurises y los lleva al médico o se los trae a comer acá, a su casa, y también por el Pistola. Siempre de chico fui así. Yo en edad escolar iba a un centro juvenil, el Club de la Alegría, y nuestros referentes siempre fueron solidarios con nosotros, nos trataban como una familia, y me inculcaron eso.

 -¿En qué consiste un día de acciones solidarias tuyas?

 -Entre Todos nació hace poquito, hace dos meses. Yo arranqué solo hace como un año, juntamos alimentos para hacer un guiso, y nos recomendaron que fuéramos a hablar con una señora que se llama Olga, que vive en el Maracaná, al lado del Cerro. Fui con mi ex y una amiga y la señora quería meternos su ideología religiosa y nosotros le dijimos que muchas gracias, pero preferíamos una movida que fuera apolítica y sin credo religioso. Eso fue un bajón porque nos salió mal. A la señora la tenían allá arriba, pero quería destacar su religión antes de ser solidaria. Le dimos las gracias y nos fuimos. Y después, pedí ropa para los gurises acá de la plaza y me respondió pila de gente en Twitter, seguí pidiendo y cuando quería acordar tenía pila de ropa. Dije "pahh", y ahí fui y puse un puesto en 18 de Julio y Eduardo Acevedo. Y ahí explotó todo, porque justo ese día tuvimos bardo con la Intendencia. Y como no me gusta callarme puse un tuit que se viralizó donde dije que me habían sacado mi lugar, y nosotros estábamos ayudando a la gente.

 -¿Qué tipo de puesto era ese? ¿Para donar la ropa o para venderla?

 -No, no, habíamos puesto un cartel que decía "agarre lo que precise". La Intendencia nos sacó porque nos dijo que no se puede hacer uso del espacio público, y menos en una zona turística en pleno 18. Y más se hizo viral porque a la semana ahí mismo pusieron un puesto de Vivir Sin Miedo (la campaña de Jorge Larrañaga para una reforma constitucional que sume militares a la seguridad interna o una prisión perpetua revisable), y ahí puse otro tuit que por qué ellos sí y nosotros no. Pero no era porque fueran de derecha, hubiera puesto lo mismo si era un puesto de empanadas: la incógnita era ¿por qué ellos sí y nosotros no? Eso también se hizo viral. Y ahí fue que me escribió Daniel Martínez y me dijo para vernos.

 -¿Vos dirigís Entre Nos? ¿Es una ONG?

 -No me gusta decir que la dirijo yo... Es un grupo de amigos. Por ahora no es una ONG, pero la vamos a tener, una cooperativa más bien. Tenemos días fijos: los martes, arrancamos por el callejón ahí al lado de la Facultad de Derecho y ahora nos estamos expandiendo por Montevideo. Ahí ayudamos mucho. Los martes repartimos ropa, y el primer y último martes de cada mes hacemos un guiso vegano, porque tenemos una compañera que es vegana y respetamos eso. Ya no recolectamos más ropa, porque tenemos demasiada. Ya no tenemos ni dónde guardarla. La guardamos en el salón gremial del IAVA y ya casi lo llenamos. Se la damos al que la precise... mientras que no la venda, porque también nos pasó que al principio la pedían y después con eso hacían feria. No, amigo, eso no.

 Ya terminamos la etapa de casi dos meses en el callejón de la Udelar, ahora vinimos a La Teja, y la semana que viene vamos al Cerro. Yo pongo en el Twitter que a qué barrio quieren que vayamos, y ahí donde se precise ropa, vamos. Buscamos gente conocida en cada barrio, no por miedo, pero no es lo mismo ir con un conocido, que mandarte así. Si vas a un barrio con un conocido, ya generás un vínculo.

 -Pero, además, integrás otro movimiento de acciones solidarias...

"Yo soy todo auténtico, soy esto. El personaje está en redes sociales. Ponerme traje arriba de la camiseta e Progreso y las medias por arriba del pantalón, o que vaya vestido así al despacho de Daniel Martínez, eso es el personaje"

 -Fe se llama. Ahí soy integrantes nomás, la dirige Fabricio Edwin. Ahí jugamos al fútbol, practicamos deporte con los gurises, y todos los miércoles la gente de Brigada Vagabunda, hinchas de Wanderers, nos da de comer a los gurises ahí en la plaza. Yo como ahí también. La finalidad es jugar al fútbol, y salir del ocio, y cenar una vez a la semana, los miércoles. Siempre es un guiso. 

 -Twitter ha sido un aliado para conseguir donaciones o gente que se sume a tus movidas, ¿no?

 -La gente cree que exploté con el Twitter y antes con el Facebook, pero no. Yo ya había explotado antes, lo que pasa es que por primera vez utilicé todos los seguidores que tenía para hacer algo bien. Yo había explotado porque después del festejo de cuando ascendimos (con Progreso a Primera A), fuimos a un baile en el Cerro y yo estaba de chancletas y medias, con unas medias de chala, de marihuana. Nos agarramos tremendo pedo ahí y dijimos: "¿Qué hacemos? ¡Vamos pa'l Suda!" empezaron a decir. Y fuimos para el Suda (baile Sud América) y ahí me sacaron una foto en la puerta que yo estaba con pantalón deportivo, medias y chancletas, y se hizo re viral. Obvio que no me dejaron entrar así. El intentar entrar ya fue una aventura. Esa foto se viralizó.

 Y otra foto de cuando yo trabajaba en la galletería Barcelona, en el Paso Molino. El dueño se jubiló y cerró la empresa. Sacaban una asadera con azúcar hirviendo, la rasqueteaban y la metían con una pileta en agua caliente, y yo saqué todo ahí -hacía 30 grados, más los hornos, 40 grados- saqué todo, le gasté 10 litros de jabón líquido al viejo y me hice un jacuzzi.  Me metí desnudo. La encargada me sacó una foto, la subí y se hizo viral.

 -También has usado la red social para opinar sobre política. Incluso divulgaste fotos de cuando te reuniste con el intendente Daniel Martínez. ¿Cómo se dio ese encuentro?

 -Se genera por ese tuit que yo puse preguntando por qué estaba Vivir Sin Miedo ahí, y a nosotros la Intendencia no nos dejó. Mis seguidores lo arrobaron, él me escribió por mensaje directo, le pasé mi número y me llamó. Ahí me dijo que quería explicarme por qué no podía tener un puesto en 18 y me dijo que quería ayudarme con la movida. Fui al despacho de él, y hablamos pila. Teníamos amigos en común como el Pistola, me contó anécdotas y eso... Me contó por qué no se podía, que era espacio público, que había que sacar un permiso, y se puso a disposición de la movida. Gracias a él estamos cerca de armar un merendero. Él en realidad no nos dio nada, pero nos dio pila de contactos.

 -Ese día, 14 de agosto, escribiste un tuit que decía "Si no diste bola así", y estabas sentado en un sillón, "no me chamuyes ahora que toy así" y estabas sentado en otro sillón mucho más elegante y sofisticado, ambos en la Intendencia, mientras esperabas a Martínez. Y te fuiste con la camiseta de Progreso y un traje negro arriba, con championes y medias por arriba del pantalón de vestir...

 -Claro, lo hice a propósito, es una forma de que la gente no prejuzgue. A mí mucha gente me tiene allá arriba por lo que estamos haciendo, y no lo está haciendo un gurí de saco y corbata, lo está haciendo un gurí con las medias por arriba del pantalón, con la cara tatuada y este corte de pelo. Lo hago a propósito, es un personaje también, que vende pila también.

 -Ahí me desconcertaste... Pensé que te mostrabas auténtico, que ese eras vos, y ahora me decís que es un personaje.

 -La autenticidad siempre está, pero busco que esté el personaje también. Ahora, así como me ves, soy todo auténtico, soy esto. El personaje está en redes sociales. Ponerme traje arriba de la camiseta y las medias por arriba del pantalón, o que vaya vestido así al despacho de Daniel Martínez, eso es el personaje.

 -¿Y de qué hablaron con el intendente?

 -Tuvo que meterse la secretaria a cortar, porque estuvimos como una hora hablando de cuando él trabajaba en la Ancap, de La Teja, teníamos pila de amigos en común, el "Carucha", un negro de acá, porque él en tiempos de dictadura se juntaba en la parroquia de La Cachimba, hablamos de todo eso. Y los últimos 15 minutos hablamos de que se iba a poner a disposición de la movida, y me preguntó qué precisaba, ahí le dije que precisábamos un ingreso mensual para no depender de la gente, y que nos gustaría en un futuro tener un merendero. Yo me lo imaginaba de acá a un año o dos, pero no, ese futuro está cerca.

 -¿Por qué está cerca?

 -Porque él vino la semana pasada a La Teja, quiso conocer a los gurises ahí, ir a la plaza.

 -¿Fue en plan candidato o hubiera ido de todos modos, hace dos años?

 -Yo a lo primero pensé que sí, que venía como candidato, y no me copaba, porque el movimiento no tiene intereses políticos. A mí la gente de derecha me ha ayudado pila, también. Pero creo que no vino con ese interés, no pidió ninguna foto ni nada. La saqué yo la foto, porque me sirve para tener me gusta y vender ese personaje, pero él no pidió nada. Capaz que lo veo muy inocente. Hace poco me citó la Cosse y yo ni la conocía.

 -Por lo que vi, vos mismo sentís que te estigmatizan mucho en redes sociales: por tu corte de pelo, por tu forma de vestir o hablar. ¿Qué te dicen?

 -Terraja, burro, plancha, pastoso, lumpen... Todo eso. Me molesta que lo vea mi familia, por mí no, me chupa un huevo porque sé quién soy y qué hago y qué no. ¿Y qué hacen ellos? Porque si me critican es porque son mejores que yo. Y no me gusta que se normalice que porque sea una red social tengan derecho a decir cualquier cosa y a bardear así. Odio que me digan "no les des bola". No, así lo estás normalizando.

 -¿No te parece que a veces caés en la misma cuando tildás a otros de "chetos" o "fachos"?

 -Es verdad, a veces me pongo clasista. Por suerte tengo amigos que me marcan cuando me equivoco y me han hecho ver eso, que no prejuzgue a otros. Yo en realidad no creo mucho en las tribus urbanas, cuando me caliento y digo "cheto" lo digo más por la cabeza, no por la forma de ser o la plata que tengas. Y "facho" es lo mismo. Es vivir en una burbuja, y no ver lo que está pasando afuera. O ponele que ven un niño pidiendo en la esquina y siguen de largo o suben el vidrio del auto, y después se enojan cuando ese niño crece y los roba o algo.

 - También solés contestarle a los que te critican por usar las medias por arriba del pantalón, pero vos criticaste a El Reja porque se fue sin medias a la fiesta de los premios Iris. ¿No es lo mismo que hacen contigo, al juzgarte por tu apariencia?

 -Sí, eso me lo señalaron también. Eso fue más en joda, porque sé que el loco es de barrio, del Cerro. Justo cuando puse eso, me saltaron y me señalaron que yo usaba las medias por arriba del pantalón, por qué le señalaba al Reja que había ido sin medias.

 -A Lacalle Pou también lo has bardeado... Le escribiste que agarre su "auto de millones de dólares" y se vaya a comer un guiso contigo, aunque no tuvieras champán.

 -Eso es más el personaje. Pero no puede salir a decir que no llega a fin de mes... Yo le puse: "Me enteré que no llegás a fin de mes, nosotros hacemos esto y esto, te invitamos a comer un guiso el martes a tal hora, disculpá que no tenemos champán". No me lo respondió. Mirá, antes escribía esas cosas porque no me leía nadie, era más de ocio, ahora me sigue mucha gente y no puedo escribir eso, por respeto a él -porque es lo que te decía: no porque sea una red social se puede decir cualquier cosa- y también porque mucha gente se identifica con él y a mí me ha ayudado.

 -¿Y qué políticos te representan? ¿Cuáles "tienen cumbia"?

"Le puse a Lacalle Pou: 'Nosotros te invitamos a un guiso el martes a tal hora, disculpá que no tenemos champán'. Antes no me leía nadie, ahora me sigue mucha gente y no puedo escribir eso, por respeto a él y porque mucha gente que se identifica con él me ha ayudado"

 -Los políticos no me representan.

 -¿Ni Daniel Martínez que te recibió en su despacho?

 -No, no me representa. Ni Tabaré. Lo único que tengo igual con Tabaré son los colores del fútbol, nada más. De política no puedo hablar mucho, porque tampoco sé, tiro fruta. Pero como persona me tocó conocer de cerca a Mujica y capaz que me vendió y yo compré, pero lo que hablé con él me llegó. Lo que vi es que me habló como padre o abuelo y no como político. Me junté con él pila de veces porque yo iba al comité del MPP, porque te daban para ir al campamento, cosas así, con los gurises, y él siempre iba porque estaban postulando al "Pacha" Sánchez.

 -¿Qué recordás que te decía Muijca?

 -Sermones. Que yo tenía que estudiar, que tenía cabeza, que por qué no estudiaba, que él no pudo estudiar y le daba rabia que los gurises que tenían oportunidades no estudiaran.

 -Sos comprometido en cuestiones sociales. El viernes pasado fuiste a la marcha por la diversidad y apoyás la ley trans, también estuviste a favor del matrimonio igualitario, la legalización del aborto y la marihuana...

 -La de la marihuana fui a la marcha y todo, y estuvo muy bueno. Nunca pensé que se podía llegar a legalizar. Acá en casa siempre tuve la libertad de fumar. Y con la ley ya se pudo fumar en la calle...

 -Ya se podía fumar en la calle antes de la ley, porque el consumo no estaba penalizado.

 -Bueno, legalmente se podía, pero en los hechos si te veía un patrullero o algo, te verdugueaba, te sacaba el porro.

 -¿Te había pasado?

 -Sí, pila de veces. Nos tiraban el porro, sólo por estar en la esquina fumando. Era rutinario.

 -¿Te preocupa leer y estar informando sobre en qué consisten las legalizaciones de las que hablamos? ¿Te informás sobre qué implica que el matrimonio sea igualitario, la marihuana sea legal o se apruebe la ley trans?

 -No. No leo, no. No leí la ley trans... Pero es como apoyar a mis amigos, ¿entendés?  Si sos mi amigo, y estás a favor, es por algo. Porque ellos sí están informados. 

-El denominador común en tu postura es que estás a favor de la libertad.

 -Sí, pila. Cada cual que haga con su vida lo que quiere, cada uno sabe las consecuencias de lo que hace.

 -Pero veo que no querés saber nada con la iniciativa de Larrañaga de sumar militares a la seguridad pública...

 -No. No quiero saber nada. Mi abuela me cuenta lo que sufrió. Estamos hablando de una señora que siempre fue de trabajo, que no sabe lo que es hacer esquina, y me cuenta que las botas siempre fueron malas. Que no es ese cuento de que si no están en nada malo no te pasa nada. A la mejor amiga de ella, en el tiempo de las botas, le desaparecieron al hijo. Que te agarraban y te llevaban de onda. Me cuenta del Paralelo 38, que por estar en huelga te llevaban. Es un tema de educación. Y aparte no los veo preparados. Se quejan de la Policía, porque si quieren poner botas, es porque no les sirve la Policía. Yo no lo veo tan distintos. Como yo digo en joda: "Un militar no tiene panza ni bigote", capaz que te puede correr, pero... está en la educación.  Cuando vino el intendente a La Teja agarré unos gurises y les pregunté si sabían quién era y no tenían ni idea. Les pregunté si sabían quién era el presidente y se quedaban pensando... Para ayudarlos les dije: "Es parecido al técnico de la selección". Y me decían "Tabárez". No sabían ni quién es el presidente de la República, y es de acá de La Teja. Educación. La educación no es la salvación, pero es por ahí.

 -Te conocí por Twitter, y ahí usás un léxico muy tuyo, muy barrial también. Traducime algunos conceptos:  "Mandarle cumbia". ¿Qué viene a ser "mandarle cumbia" a algo?

 -No tiene nada que ver con el género musical. Podés mandarle cumbia escuchando rock. Mandar cumbia es ser mandado, expresar lo que uno siente, ir para adelante, animarse a algo. No callarse. Muchas veces nos callamos por miedo o por temor a no ser aceptados. Mucha gente no se muestra cómo es por miedo a no ser aceptado.

 -¿Y  cuando decís "se me apagó la tele"?

 -Cuando me pongo clasista, o me mando una cagada: se me apagó el bocho. Es como decir "mala mía".

 -La bebida o el "escabio" también está muy presente en tu cuenta de Twitter, sobre todo la cerveza y el vino en caja. ¿Es parte  de ser auténtico y mostrarte cómo sos? 

 -Muestro qué estoy haciendo, ahí no hay personaje. La plata que agarro de algún trabajito o changa, si mi abuela precisa, le doy, y si no, primero me aseguro la entrada para ver a Progreso, después me juego un Supermatch (juego de apuestas deportivas) y me tomo algo con amigos. Vino o cerveza.

 -¿Nunca un VCP embotellado?

 -Sí, en la previa de los partidos, vamos a lo de un amigo que tiene tarasca y descorcha uno. Estoy esperando el de Daniel Martínez...

 -El 20 de setiembre tuiteaste: "- Hice q se mueva un blandengue -me metí desnudo en el trabajo donde lavan asaderas e hice un jacuzzi -Pablito Lescano me invitó a su recital -Tomé café con Daniel Martínez mientras curtía traje y resortes. Nunca pero nunca me callé ni me van a callar. Puedo morir en paz".  No te creo, seguro te quedan muchas cosas por hacer. ¿Por ejemplo?

-Ese es el personajes, ¿ves? Me quedan pila de cosas... El merendero sí o sí, en homenaje al Pistola. Y  darle herramientas a los gurises del barrio. El otro día un padre llevó a su hijo a los jueguitos de acá del Cerro y el gurí le dijo "gracias por traerme al Parque Rodó", porque nunca salió de La Teja. Yo más o menos conocí otras cosas, porque he podido conocer otras realidades. Yo a veces prejuzgo también, pero conozco otras cosas.

-¿Qué otras realidades conocés?

-Tuve novias de familia bien, de familias que trabajaron y llegaron a tener profesiones, de lo más alto económicamente a lo más bajo, conocí lo que es Carrasco, Malvín, porque tuve novias de esos lados. Vi que en otros barrios le pagan 30.000 pesos a un portero, acá en mi barrio con 30.000 pesos... no sé... es un mes de mucho laburo. Bien por el portero o el de la empresa de seguridad que se la rebuscó y tiene su laburo, pero le estás pagando  a alguien para que te cuide tu casa, para tener empleados. O que le paguen a otro para que hagan cosas de la casa que ellos no quieren hacer.  Juegan competencia a ver quién le da mejor comida al portero: una muzzarella o sushi. Capaz que podés darle fideos con queso y con 10 pesitos que te sobran, podés comprar un pan y darle a un gurí de la calle. Eso digo.

-Me decías en un audio que vas a la plaza para sacar a los gurises de la calle, para que hagan algo y no estén robando... ¿Ves muchos gurises que si no están haciendo nada arrancan para la delincuencia?

 -No sólo para que no delincan, sino para que no estén en la esquina y se la coman de garrón. Ponele que hay un robo, y mi hermano y sus amigos están en la esquina, y pasa la Policía, aunque vos no hayas tenido nada que ver, ellos te meten pa' adentro. Le ha pasado a pila de gurises, que se la comieron de costado. "Pasó tal cosa, no estamos agarrando ningún chorro; bueno, hay que meter alguien pa'adentro". En muchos barrios sos culpable hasta que se demuestre lo contrario. También jugamos al fútbol con ellos para que no se metan en la delincuencia, por supuesto.

 Y no darle de comer a la prensa y la Policía, en el sentido de que si estás haciendo cosas malas, van a hablar, pero si vos no lo das para que hablen, no te pueden meter en esa bolsa. Si vos estudiás, hacés deporte, les demostrás que salís adelante, ya está. Muchos gurises dicen: "La yuta tal cosa" o "en el informativo pasan que en Cerro Norte tal cosa". Bueno, dales motivos para que no hablen: estudiá, trabajá, hacé deporte y no van a decir nada. Si hablan es de caretas y van a quedar pegado ellos. A veces está la Policía parada y los gurises se entran a mirar entre ellos y miran de reojos a los policías. ¡Hacé la tuya! Por mí, que el policía se fume un cigarro al lado mío, que yo voy a seguir haciendo lo que estoy haciendo, que no es nada malo.

 -¿Vos nunca te sentiste tentado de agarrar por el mal camino y seguir a tus amigos de la esquina?

 -No. Si yo me metía en la delincuencia era de rata, porque tenía una abuela rompiéndose el lomo 14 horas por día trabajando para cuidarme a mí y mis hermanos. No tenía la excusa de robar por hambre. Si lo hacía era para hacerme el vivo nomás, y para hacer daño.

 -¿Te cuesta conseguir laburo?

 -Tenemos un grupito de cuatro gurises que somos bien vistos en el barrio y cortamos pasto o cortamos leña. De albañil tenía antes, cuando me llevaba mi tío, pero ahora agarró un empleo público y ya no hace changas. Pero si tengo que hacer ferias, lo hago acá en la cuadra. Trato de rebuscármelas. Me gustaría tener un laburo fijo, por mí, no por los demás, pero es difícil sin estudios y con esta apariencia. Pero claro que tampoco me interesa: éste soy yo.

 -Me llamó la atención un tuit tuyo que decía: "Trabajo no, cumbia sí". 

 -Ese es el personaje. Esa es una frase de Damas Gratis. También tuitée "Te quiero pero soy un bardo", cosas así. Yo no pienso conseguir laburo por Twitter. Hay otra frase que puse: "Desde que nací, nací para bardear". Hace poco fui a una entrevista de radio de la Udelar y me presentaron con esa frase, que es de Flema, la banda de punk que me gusta.  Ojo, para mí "bardear" no tiene un mal significado: es no callarme.

 -¿Te trazás metas, objetivos, o preferís ir viviendo el día a día?

 -El día a día. Hasta hace poco planificaba ser jugador de fútbol, jugué en muchos cuadros, tenía condiciones, pero me lesioné. Jugué en Bella Vista, pero tengo los ligamentos desoldados, y mi abuela nunca quiso que me operara, porque podía llegar a perder la pierna... Hasta los 13 años tuve cartílago, no estaba bien desarrollado porque como poca comida, vitaminas 0, nunca tomé leche. Me hago el mate y pan con manteca, no soy muy de comer. También jugué en Progreso. En mi mejor momento, cuando me quería Defensor, me fui para Progreso porque era hincha. Ahí estaba en Bella Vista, pero no acepté ni seguir en Bella Vista ni irme a Defensor, elegí ir a Progreso. Digo que fue un error porque dejé pasar un tren, para jugar en la B, no le ganábamos a nadie, no nos iba a ver nadie, pero ta... era el cuadro de mis amores. Por ese lado, disfruté pila. Tenía 12, estaba en preséptima. El último cuadro en el que jugué fue en La Luz, estaba bravo ahí... Dejé antes de terminar todo roto.

 -La Iaia, como le decís vos a tu abuela, está siempre presente en tu Twitter. ¿Quién es tu iaia?

"Muchos gurises dicen: 'La yuta tal cosa' o 'en el informativo dicen que en Cerro Norte'... Bueno, dales motivos para que no hablen: estudiá, trabajá, hacé deporte y no van a decir nada. Si hablan es de caretas y van a quedar pegado ellos"

 -Es mi ídola. Si tuviera que decir alguien que admiro es a ella. Se llama Hilda, pero la conocen como Mary, porque cuando era joven había una comedia y ella se parecía mucho al personaje que  se llamaba Mary, y le quedó. Tiene 64 años, siempre laburó en la cocina, ahora tiene algunas nanas, pero se metió de nuevo porque cuida a una amiga de ella. Es quien hizo de papá, mamá, abuela, todo, era la que me llevaba a practicar.

 -Conociste a Mujica y a Martínez, y opinás con frecuencia de asuntos políticos. ¿Has pensado en dedicarte a la política?

 -Si aprendo algo de política y no consigo laburo, en un futuro capaz que sí, porque es un ingreso. Pero hoy en día no porque no sé nada de política. Pero no me gusta. Creo que divide. Y no me gustan las cosas que dividen. No tengo mucho interés. Es cosa de aprender, porque no precisás ir a un centro educativo para aprender.

 -¿Cuál de todas tus acciones solidarias te dio más satisfacción personal?

 -Ayudar a los del barrio, porque son los gurises que yo conozco. Hace poco ayudé a un gurí bien de bien, que siempre me miraba los championes. Un día dijo: "Pah Lale, ¡con tremendos resortes estás jugando!" y pude conseguirle un par igual a los míos. Nosotros pedimos donaciones, ¿viste? Entonces de la nada me apareció un par idéntico a los que yo tenía y se los regalé a él. Quedó congelado y no me dijo ni gracias, pero su cara fue la mejor paga. Eso y darle de comer a gurises que lo necesitan es lo mejor. A veces pienso: "No tengo laburo y capaz que necesito un poco más de plata", pero después repaso lo que estoy haciendo y eso le gana a todo, es mucho más que plata, mucho más que todo. Acostarte y tener la satisfacción de estar ayudando a otros es lo más. Mismo una vez que estaba en la feria, vino una señora y nos dijo: "Ay negritos, ¿me aguantan unos días hasta que cobre?". Y le dijimos: "Lea señora", que decía que agarraran lo que precisaran. La cara que puso estuvo de más. 

 .-¿Sos feliz? 

 -¿Qué es la felicidad? En un año, el 90% la paso bien, así que creo que soy feliz.