La cuadra del Parque Rodó que se convirtió en el agujero negro de los robos a autos

En la calle Blanes, en la cuadra que va de Maldonado a Durazno, casi no quedan autos estacionados de noche. A diferencia de lo que sucede en el resto del barrio, donde pueden verse varios vehículos pasando la noche (en parte debido a la demanda insatisfecha de garajes en el barrio), ese tramo de Blanes queda vacío.

No siempre fue así. El motivo es la cantidad de robos a autos que se registraron en los últimos meses en esa zona, con una frecuencia muchísimo mayor que en el resto del barrio. Según un grupo de vecinos que se está organizando para buscar soluciones a este problema, los robos -por lo general mediante roturas de vidrio a los autos- se producen todas las noches.

Pablo, uno de los vecinos de la cuadra, dijo a Montevideo Portal que el problema comenzó con la mayor presencia de boliches en la zona, pocos años atrás, pero que se intensificó tremendamente en los últimos seis meses.

"Hay un hecho que es elocuente: muchos vecinos empezaron a dejar sus autos a dos cuadras y no volvieron a tener problemas. La mayoría de los casos se concentra en Blanes y Maldonado, es en esta cuadra donde no se pueden dejar autos", señaló.

Según los vecinos, pueden ocurrir robos a tres o cuatro coches en la misma cuadra en una sola noche, con más frecuencia los viernes y sábados por ser los días en que hay más gente debido a los boliches de la zona. El promedio, según la cuenta que llevan, es de unos seis autos por semana solo en esa cuadra. Esta madrugada, de hecho, se registró un nuevo caso.

Carrera de cien metros

¿Por qué esa cuadra en particular? Los vecinos creen que hay varios factores que colaboran: una iluminación deficiente, bocas de venta de droga muy cercanas, vías de "escape" sencillas, la existencia de muchos comercios que cierran de noche y dejan la cuadra semivacía, y el hecho de que se use como "estacionamiento" para los boliches cercanos, ya que no hay pubs en esa cuadra en particular (y por lo tanto menos movimiento).

Piden además a la Policía que, si no puede detener a quienes roban, que apunte al menos a la boca de drogas cercana, ya que calculan que es allí donde inmediatamente se cambia o vende lo robado.

Además, Pablo señaló que es una esquina que se disputan los cuidacoches, lo que ha llevado no solo a que roten cada algunos meses sino que se produzcan peleas e incluso tiroteos entre grupos. Contó que no es extraño que aparezcan armas blancas ocultas en los balcones o bajo los tachos de basura y recordó que incluso la iglesia de la Congregación Evangélica Alemana de Montevideo, tras sufrir robos, debió poner una cerca eléctrica.

Un video grabado por la cámara de seguridad de una pinturería que está en la esquina de Maldonado y Blanes (que adjuntamos parcialmente en la nota) revela la "impunidad con la que actúan", según Pablo. "La cámara muestra cómo roban un auto. Pasan cinco minutos, rompen la vidriera del comercio y también entran a robar ahí", dijo.

Respuestas policiales distintas

Según Pablo, han hablado infinidad de veces con la Policía y obtuvieron respuestas muy distintas para solucionar este problema. Les dijeron que era "tierra de nadie", les aconsejaron que "pagaran un garaje", y en la última ocasión que "compren un bate de baseball y les partan las piernas".

De acuerdo a lo que informaron desde el Ministerio del Interior a Montevideo Portal, los eventos predominantes registrados en esa zona (y denunciados) desde el 2 de marzo fueron: ocho hurtos en interior de vehículos, cinco daños de vehículos (sin que se produjera hurto), dos hurtos de vehículos, cinco hurtos a transeúntes, una rapiña en vía pública y un hurto a automovilista.

Al analizar el horario donde predominan estos hechos se observa una "marcada predominancia entre las 00 y las 03 horas de la madrugada", señalaron las fuentes.

Se tomarán recaudos de aumentar patrullaje y presencia policial en la Zona de Unidades de Respuesta de la Policía de Montevideo e Investigaciones, indicaron.

Para Pablo, estos números son una décima parte de lo que se ha registrado desde entonces. Aclaró que en muchos casos las roturas y robos no son denunciados porque son a personas que van a los boliches, que deciden  no tener que quedarse hasta la madrugada por una denuncia (según les aconseja la misma Policía, dijo).

En el Parque Rodó "esto no pasaba antes de los boliches", apuntó Pablo, que dijo que los dueños de los pubs están ajenos al problema que generan cuando deberían tomar medidas o colaborar. "Antes el problema principal para los vecinos eran los ruidos molestos. Ahora la esquina se ha vuelto tan complicada que lo que importa son los robos", dijo.

Los vecinos de la cuadra, de hecho, están pensando en alquilar un pasacalles para colocar en la esquina de Blanes y Maldonado, que alerte a quienes llegan ahí que su auto será seguramente robado.

Otros vecinos consultados por Montevideo Portal compararon lo que está sucediendo en el Parque Rodó y Cordón con lo que pasara años atrás con la movida de la Ciudad Vieja. "Dejaron que la inseguridad ganara el lugar y la movida en la Ciudad Vieja se terminó", comentaron.