Contenido creado por Cecilia Presa
Internacionales

Relevo de pruebas

Joven confesó que denunció falsamente a su padre por abuso sexual, inducido por su madre

Ocurrió en Argentina. Tomás Ghisoni, de 20 años, grabó un video en el que relata cómo fue usado de niño para declarar contra su progenitor.

20.07.2025 10:47

Lectura: 3'

2025-07-20T10:47:00-03:00
Compartir en

Tomás Ghisoni, un joven argentino de 20 años, confesó públicamente que denunció falsamente a su padre por abuso sexual y que lo hizo manipulado por su madre, la médica Andrea Vázquez. En un video difundido en redes sociales, el joven relató con angustia el proceso que llevó a su padre, el obstetra Pablo Ghisoni, a estar tres años preso preventivamente por una acusación que, según dice ahora, nunca ocurrió.

“Mi nombre es Tomás Ghisoni. Estoy haciendo este video para contar algo que me costó años decir. Cuando era adolescente acusé falsamente a mi padre de algo gravísimo. Lo más difícil de admitir es que sostuve esa acusación por más de 10 años. Crecí escuchando que mi papá era peligroso y que le tenía que tener miedo. No fue una mentira inventada por mí. Fue una historia sostenida, repetida e impuesta por mi madre”, comienza diciendo el joven.

El caso se originó en octubre de 2012, cuando un tribunal ordenó que los tres hijos de la pareja pasaran a vivir con su padre. Dos años más tarde, en 2014, Tomás y uno de sus hermanos denunciaron a Ghisoni por abuso sexual y regresaron al cuidado de su madre. El tercer hijo, Francisco, se negó a acompañar la acusación y permaneció con su padre. En 2023, el juicio oral terminó con la absolución total de los acusados, aunque la causa continúa apelada por la madre.

Durante ese tiempo, Pablo Ghisoni pasó dos años internado en una institución de salud mental y otro bajo prisión domiciliaria, antes de llegar a juicio. El proceso judicial estuvo marcado por marchas públicas, apariciones mediáticas y una fuerte campaña en su contra.

En el video, Tomás también relata el impacto personal que tuvo sostener durante una década una versión que ahora dice haber sido inducida: “La historia (del abuso) con el tiempo se transformó en una verdad emocional, sin sustento real. En consecuencia, mi papá fue preso tres años. Perdió su trabajo, su nombre, su salud, su dignidad. En todo esto, yo también perdí la confianza en mí mismo, a mi familia y a mi papá durante más de una década”.

Más adelante, agrega: “Luego de años, entendí que la historia que yo había defendido con tanta fuerza, que hasta milité, no era cierta. Eso me dejó desarmado, roto. Pelear por una causa que creés justa y darte cuenta de que era mentira, duele horrores. Yo no fui abusado. No fui una víctima de mi padre. Fui usado, como una cosa”.

Y concluye describiendo cómo fue inducido a mentir: “Fui víctima de un entorno que me enseñó a repetir un relato. Me enseñó qué decir, qué no decir, qué dibujar. Ya sea en audiencias o distintos contextos. Y yo, sin entenderlo del todo, lo hice. Y eso destruyó a un hombre inocente”.

Ahora resta saber si la apelación presentada por Andrea Vázquez seguirá adelante o si la absolución quedará firme, luego de la confesión del hijo denunciante. El caso sigue en etapa judicial.