Isabel Allende en homenaje a su padre en Montevideo

Sobre el mediodía del domingo se llevó a cabo un acto de homenaje al ex presidente chileno Salvador Allende, de cuyo derrocamiento y asesinato se cumplen 38 años.

El evento, convocado por el Partido Socialista del Uruguay, contó con la presencia de decenas de militantes y varias destacadas figuras frenteamplistas. Si bien el homenaje se realiza desde más de una década, cuando se bautizó con el nombre Salvado Allende la plazoleta de Avenida Brasil y Brito del Pino, en esta ocasión contó con la presencia de la senadora chilena Isabel Allende, hija del extinto mandatario.

La oratoria fue inaugurada por el ingeniero Daniel Martínez, quien recordó la angustia vivida en 1973, cuando se acumulaban las peores noticias acerca de Chile. "Allende nos enseñó que no estamos acá para administrar un sistema injusto, sino para construir uno infinitamente mas equitativo", destacó Martínez, añadiendo que precisamente esa forma de Allende de vivir el socialismo era lo que nos conmovía, al ver cómo estaba siendo pisoteado por la traición".

Pese al tiempo transcurrido, "el ejemplo de vida de Salvador Allende sigue vigente en toda America Latina, en todas aquellas naciones donde soñamos con construir una forma diferente de encarar la vida, no basada en el lucro sino en la solidaridad humana", afirmó

A su turno, Isabel Allende se mostró emocionada por el homenaje, y recordó el esfuerzo realizado por la gente para erigir el busto que preside la plazoleta. Posteriormente, recordó que la figura de Salvador Allende "es reconocida hoy en todo el mundo", y trazó una semblanza de la militancia de su padre, que comenzó en secundaria, y que tempranamente lo llevó a ocupar cargos de importancia creciente. "Pero no importan los cargos, lo que importa es el hombre capaz de estar siempre al lado de los que más lo necesitaban", enfatizó.

La senadora trasandina calificó a su padre como "un pedagogo social", que recorría el país "enseñándole a la gente que podía soñar con un país mejor, un país que permitiera a cada uno desarrollarse según sus capacidades, un país que no segregaba".

Asimismo, destacó su doble lucha - en carácter de político y de médico-contra la mortalidad infantil "Nos gusta recordar a ese luchador consecuente", dijo.

Luego repasó someramente los mayores logros del gobierno de su padre, el modo en que "pregonaba la solución pacífica a los conflictos", y la medida más recordada: la nacionalización del cobre, logro desbaratado luego del golpe militar de 1973. Subrayó que "dos tercios del cobre producido en chile, está desde la dictadura en manos privadas".

También mencionó el trato prioritario de la salud y la educación en la administración Allende, y afirmó que su padre "vería con orgullo" las movilizaciones de estudiantes que se viven en la actualidad en el país, que "desde hace tres meses están en la calle dándonos una lección, enseñándonos que es posible lucha por un sistema que no segregue y no promueva la desigualdad social".

Pasando al plano familiar, hizo referencia a los recientes estudios forenses realizados a los restos de Salvador Allende, que confirmaron que se suicidó durante el ataque militar a la Casa de la Moneda. "Estos días no han sido fáciles: como familia hemos cerrado un ciclo doloroso y estamos en paz, pero eso no significa que se haya cerrado para la Justicia", manifestó Isabel Allende ante el entusiasmo de los presentes. "La justicia tiene que seguir haciendo su trabajo, nuestras víctimas merecen que haya justicia, reconocimiento y reparación", remarcó.

"Salvador Allende ha vuelto está en su lugar, está tranquilo con los suyos, ahora nos corresponde a nosotros y a las generaciones jóvenes tomar esa bandera", concluyó la senadora chilena, no sin antes agradecer "a mis hermanos uruguayos", refiriendo que "siempre he sentido que acá hay cariño, identidad, y ese afecto que nos reconforta cuando se han vivido momentos duros."