La policía investiga un insólito intento de introducir de forma ilegal equipamiento de comunicaciones al penal de Libertad.

Según informara el Ministerio del Interior, policías electricistas procedieron a la inspección de un frigobar enviado a un presidiario.

Al desarmar el electrodoméstico, los funcionarios se llevaron una sorpresa: en la parte del motor había 17 celulares, 4 auriculares y 4 cables USB.

El refrigerador fue incautado de inmediato, y tanto el destinatario como el remitente fueron puestos a disposición de la Justicia.