Inmigrantes españoles se organizan y movilizan en Montevideo

En la noche del martes pasado, la sede uruguaya del Partido Popular español - ubicada sobre la calle Joaquín de Salterain - fue "escrachada" por un puñado de jóvenes españoles, en rechazo a la campaña electoral que el partido español realizará en unos meses, en la previa de otra elección parlamentaria de ese país.

Los manifestantes conforman la versión en Uruguay de "Marea Granate", un movimiento "trasnacional" que agrupa a emigrantes españoles que abandonaron su país en los últimos años a raíz de la crisis económica. En Montevideo, son alrededor de 40 los españoles que participan activamente del movimiento, aunque hay otros que participan con menos frecuencia. La mayoría, menores de 40 años.

El vocero del grupo, Jorge Castrillón, dijo a Montevideo Portal que "en este momento el grupo está focalizado en una campaña informativa de cara a la campaña electoral que se va a venir en Uruguay por las elecciones al Parlamento Europeo que tendrán lugar en España en el próximo 25 de mayo. La preocupación del movimiento es que los cerca de 200 mil españoles o descendientes de españoles habilitados para votar en Uruguay "sepan lo que está pasando en nuestro país".

Entre las advertencias que Marea Granate piensa hacer a los hispano-uruguayos es que "recientemente el gobierno español decidió recortar la tarjeta sanitaria a todos los ciudadanos que hayan emigrado". Según el vocero, la acción "viola nuestro principio de universalidad de la salud y provocará, por ejemplo, que si un español emigrado retorna le van a cobrar en los hospitales".

Castrillón aseguró que "la Embajada de España en Uruguay no informa sobre estas cosas".

El diálogo entre este grupo y los uruguayos de origen español no siempre es sencillo. Castrillón reconoce que "existe una brecha" creada tanto por la edad como por la forma de pensar. "Muchos de los que integramos Marea Granate participamos de los movimientos del 15M", cuenta el vocero, reconociendo que en el grupo existe una posición "más de izquierda", lo que contrasta con la forma de pensar de los españoles radicados desde hace décadas en Uruguay, "más conservadores". En ese sentido, consideró que "el uruguayo de origen español idealiza mucho España y le cuesta entender que ya no es aquel país modelo en política sociales".

Este sábado, el grupo se concentrará frente a la Embajada de España, para acompañar "simbólicamente" las Marchas de la Dignidad que se realizarán en el país europeo el mismo día.

"Nosotros siempre decimos que no nos fuimos sino que nos echaron", remarcó Castrillón, aunque aclaró que todos los integrantes del grupo están "agradecidos" con la forma en que fueron recibidos por Uruguay, especialmente "laboralmente", dado que la mayoría cuenta con "estudios superiores".

De hecho, el vocero asegura que "una de las cosas que aprendimos acá es la importancia de tratar bien a los inmigrantes", recordando que "durante la primera década del siglo XXI muchos uruguayos emigraron a España y no fueron bien recibidos". Por esa razón, el movimiento critica con énfasis "la dureza de la Ley de Extranjería de nuestro país" y reclama que "se aplique el principio de reciprocidad".

"Después de Estados Unidos, España es el país que deporta más uruguayos y eso nos parece que no está bien", afirmó Castrillón.