INE defendió cálculo de la pobreza

El Instituto Nacional de Estadística (INE) afirmó que "no hubo ningún cambio metodológico" en la forma de medir la pobreza desde la creación del FONASA, rechazando los cuestionamientos hechos por la diputada del Partido Nacional Ana Lía Piñeyrúa. La directora del INE, Laura Nalbarte, y su equipo comparecieron este jueves en la Comisión de Población de la Cámara de Diputados.

Durante la sesión de la comisión, la subdirectora de Estadísticas Sociodemográficas del INE, Adriana Vernengo, dijo a Montevideo Portal que para el cálculo de la pobreza se toman en cuenta "los ingresos líquidos y las transferencias recibidas por el Estado", según indican las recomendaciones internacionales seguidas por el organismo.

Desde 1991 en la Encuesta Continua de Hogares elaborada por el INE "se imputan como ingresos de los hogares las cuotas mutuales correspondientes a los afiliados a la ex DISSE y a aquellos que reciben atención a través de los hospitales Militar y Policial, en el entendido de que en estos casos el beneficio es 'una entrada derivada de la intervención en actividades económicas' y que existe una contraprestación (aportes del trabajador y aportes del empleador)", consigna el documento presentado en comisión por Vernengo.

El mismo agrega que cuando en enero de 2008 comenzó a aplicarse el FONASA "se considera al igual que desde 1991 como ingreso del hogar la valoración de la o las cuotas de la IAMC (Instituciones de Asistencia Médica Colectiva), ya que se obtienen con las mismas características y obligaciones (aporte de una porcentaje del salario)".

Vernengo indicó que "lo que pasó es que el FONASA abarca a más personas que DISSE, porque se sumaron más colectivos, y ha mejorado la formalidad, porque se trata de un sistema que está muy ligado a la formalidad".

En su convocatoria, Ana Lía Piñeyrúa afirmaba que la forma en que el INE mide la pobreza "no es correcta" y que al computar la cuota de FONASA se sube "artificialmente el ingreso de las personas" y disminuye "también artificialmente" el indicador de pobreza.

En ese sentido, Piñeyrúa sostiene que "si la medición se hiciera en forma correcta, la pobreza alcanzaría valores similares a los registrados a fines de 1994".

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