Uruguay participa desde hace varias décadas en Fuerzas de Paz fuera de fronteras, tanto con contingentes como con observadores, según la necesidad y las indicaciones de las Naciones Unidas. Actualmente tiene 1.178 efectivos desplegados. De ellos, 1.163 son tropas de contingentes y 45 en cargos individuales, sea oficiales del Estado Mayor u observadores. Del total, 71 son mujeres.

En 1992 se desplegó el primer batallón uruguayo en Camboya y uno en Mozambique. Luego en Angola y Haití. Desde el 2001 hay un batallón en la Republica Democrática del Congo, el desafío más complejo con el que lidian efectivos uruguayos. Pero presencia uruguaya en misiones de paz hay desde la década del 30 del siglo pasado, cuando llegaron observadores militares uruguayos al Chaco Boreal en Bolivia.

Recientemente tuvimos la oportunidad de entrevistar personalmente al General Mario Stevenazzi, Jefe del Estado Mayor del Ejército, quien se desempeñó durante aproximadamente 5 meses como director del Sistema Nacional de Mantenimiento de Operaciones de Paz, un organismo dependiente del Ministerio de Defensa. Esta semana asumió su nueva responsabilidad como Comandante de la División N° 1 del Ejército en Montevideo, por lo cual esta entrevista es una oportuna forma de resumir el cargo que ha ocupado en los últimos tiempos. En su haber, también, participación personal en las misiones de paz en Congo y Camboya.

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P: General, sería bueno comenzar tratando de comprender en qué consisten las misiones de paz, en las que los efectivos uruguayos dependen de las Naciones Unidas. Hay efectivos desplegados en el terreno, misiones de verificación de cumplimientos de acuerdos, así como observadores. ¿Siempre en zonas complejas?

R: Siempre, en zonas donde hay conflictos o posconflicto. En este momento, nosotros tenemos observadores militares en República Democrática del Congo, que son separados del batallón de Uruguay. En el Congo hay hoy alrededor de 800 efectivos y como somos la reserva de la fuerza de Naciones Unidas en el país, estamos siendo movidos a donde están los principales fotos de problemas relacionados a la seguridad del propio país.

También en India-Pakistán, en Colombia, República Centroafricana, 2 observadores militares en Líbano. Hemos tenido observación militar en 30 ó 40 países. Tenemos ahora 170 efectivos en el Golan en Siria y 41 en el Sinaí.

En el sur de los Altos del Golan del lado sirio, hay desde hace pocos meses hay 170 efectivos uruguayos, cuya misión es de contralor, no una misión clásica de las Naciones Unidas, o sea no protección de civiles. La misión es verificar que el acuerdo de separación de fuerzas entre Siria e Israel de 1974 se cumpla y se reporte inmediatamente si se detecta una violación.De esto deriva también el nombre de la fuerza, UNDOF, que en su sigla en inglés es United Nations Disengagement Observation Force.

También se lo utiliza como elemento verificador en caso que al comando de la organización le lleguen reportes desde algún lugar de la zona de operaciones donde está Uruguay sobre una violación, debe ir, verificar y reportar. Solamente se utiliza la fuerza en autodefensa o en caso extremo que se le indique específicamente.

P: Todos sabemos lo que ha estado ocurriendo en Siria desde hace años. Se manda una tropa uruguaya para allí y desde el Comando del Ejército ¿no se siente que se los envía a una situación de locos? Perdóneme usted el término no muy profesional...

R: No, está muy bien, está entendida la pregunta. El Ejército y el Sistema Nacional de Operaciones, antes de mandar gente a una misión, tiene que tener determinados requerimientos. El primero es el político que se tiene que adaptar a los conceptos generales de fuerzas fuera del país. O sea, colaborar con la política exterior que el poder político marque sobre el Estado. . Antes del despliegue de cualquier misión hacemos un estudio genérico de la misión que se va a cumplir y comenzamos con los antecedentes más antiguos para ver cómo evolucionan los conflictos y cuáles son los niveles de acuerdo que se logran para que garantice que esa misión se pueda cumplir adecuadamente.

Hemos cumplido una cantidad de misiones en el extranjero, ya tenemos amplia experiencia y con la información que se tiene uno puede evaluar perfectamente a qué vamos, cómo vamos y se instruye al personal para cumplir esa misión. No es que se los manda a ver qué pasa. No, eso no ocurre. Claro que lógicamente hay riesgos. Donde hay misión militar hay riesgo porque hay conflicto. Pero al lugar uno va preparado para cumplir la misión.

P: La pregunta es si acaso eso alcanza. O sea si en algún momento, viendo la naturaleza de la guerra y la crueldad de las partes involucradas, en el Comando del Ejército en algún momento se preguntan si acaso es bueno mandar allí a efectivos uruguayos. Recordemos que hubo acciones también contra Cascos Azules, como el secuestro de parte de un contingente, creo que de Fiji.

R: Así es, hubo secuestros, hubo acciones contra los propios contingentes. Nosotros tratamos de reducir al mínimo con nuestras acciones allá este tipo de riesgos y el personal va preparado para cumplir una función militar si la debiera cumplir acorde al mandato que Naciones Unidas le dé y el país autorice. Hoy están en el marco del Capítulo VI de la ONU, haciendo una verificación del cumplimiento de acuerdos, pero tiene una capacidad importante militar de autodefensa apoyado por todas las medidas que se toman para evitar que la fuerza se vea involucrada en acciones que sean ajenas a su responsabilidad.

P: El tema es que no los van a ir a secuestrar o atacar por algo que hayan hecho, sino por esa dinámica tan especial de la guerra.

R: Uruguay tiene como principal característica en todas las operaciones la imparcialidad. Ese es el esfuerzo más grande, esa es la bandera de Uruguay, la imparcialidad. Por lo tanto, no hay un riesgo inminente de que alguna fuerza pueda querer tomar represalias con Uruguay ahí. Uruguay está cumpliendo una misión encomendada por las Naciones Unidas con total imparcialidad de uno y otro lado y eso nos da muchas garantías.

P: General, analizando todas estas misiones ¿usted se dice : "Uruguay está aportando a la paz"?

R: Sí, no tengo ninguna duda de eso. Basta con ir a cada uno de los lugares donde Uruguay intervino, preguntar a ver cuál fue el comportamiento de las tropas uruguayas y ver las reacciones. Mire, cuando yo me venía de Camboya, siendo un Teniente de 25 años, hace 30 años, en el momento en que se retira el batallón, yo me quedo a cargo del cierre del batallón en el aeropuerto. Y vi cada uno de los aviones que se fue con el personal uruguayo. Y vi a cientos de personas llorando, pero llorando de verdad porque se iba el contingente uruguayo de la zona.

P: Se sentían protegidos...

R: Exacto. Se sentían protegidos... Y en todos los lugares donde hemos estado, cada vez que instalamos una base y nos tenemos que mover- ya que son las Naciones Unidas quienes deciden al respecto, no nosotros- hay una desazón por parte de la población que siente que pierde un amigo. Es que lo primero que tiene el contingente uruguayo es que se hace amigo de todo el mundo en los lugares donde está.

P: Les enseñan a jugar al fútbol...

R: Al fútbol...Y enseñamos cuáles son los cuadros de Uruguay, cantan el himno, hacen todo. Inmediatamente se les va un amigo pero se les va un elemento de protección que cumple con la misión que le da las Naciones Unidas. Porque Uruguay cuando tiene que empeñarse militarmente para cumplir, se empeña militarmente sin ningún tipo de problema.

P: Un país chico cumpliendo estas misiones de paz y actuando de una forma por la que la gente llora cuando se va....es muy fuerte ¿no?

R: Es muy fuerte. Claro que es muy fuerte. Y a todos nos llega. Acá se piensan que como somos militares nosotros no podemos llorar, no podemos ponernos tristes. Pero no es así. En El Congo pasaba exactamente lo mismo. Nos movemos de una base, y en todos lados, ese sentimiento de desazón, de lástima, de "ojalá vuelvan". En el Congo especialmente, en el Este, donde está Uruguay, cuando nos vamos de un lado dejamos un flanco descubierto y eso preocupa a la gente. También a los militares. Pero tenemos que cumplir la misión tal cual la determina la ONU.

P: ¿Qué es lo más emotivo que usted vivió, general?

R: Bueno, eso que te conté recién fue una de las cosas más emotivas... Ver que la gente en general, la población, los niños, las familias lloren porque se va un contingente uruguayo de un área, de un lugar, quizá sea de lo más emotivo. Yo particularmente, mi experiencia personal, tuve cosas buenas, viví momentos buenos emotivamente hablando, y otros muy malos, donde vi morir niños, donde vi morir gente a la que no pudimos ayudar, que lamentablemente o llegamos tarde o la situación no nos permitió dar la mano que teníamos que haber dado... y realmente uno madura, uno cumple las misiones, sobre todo cuando va muy joven, madura muy rápidamente, ¿verdad? Entonces llega a Uruguay y se da cuenta que vivimos en un paraíso, un país hermoso, donde los problemas son mucho más chicos que los que tiene mucha gente en diferentes partes del mundo.

P: ¿Cuáles son los intereses para participar en estas misiones?

R: Para el Ejército, esto es la forma de entrenamiento más económica y real a la cual puede acceder. Esto permite tener un Ejército entrenado y preparado de forma permanente para cualquier situación en Uruguay, que ojalá no haya nunca. Nosotros en Uruguay vivimos un paraíso de seguridad regional en cuanto a las actividades militares que hoy indica que el Ejército no pueda ser empleado en ningún lado pero, sin embargo, tenemos que tener un Ejército preparado.

Después, desde el punto de vista económico, existe un aporte económico importante de las Naciones Unidas a los participantes y existe lógicamente un aporte económico individual a cada uno de los participantes.

Capaz que usted le pregunta a algunos soldados: "¿Por qué está acá?" y le van a decir: "Porque económicamente me sirve" otros, "porque yo me preparé como militar, soy profesional militar y acá puedo cumplir por lo menos parte de mi sueño de ser militar".


Denuncias en Haití


P: ¿Qué puede comentar acerca de las informaciones que han circulado sobre excesos cometidos o actitudes indebidas, entre otros por soldados del ejército uruguayo, respecto a civiles en las algunas zonas en las que operaban, respecto a mujeres locales?¿Es cierto?

R: Inicialmente acerca de este tema quisiera expresar lo que es la posición oficial de nuestro Ejército y del SINOMAPA al respecto, los casos de explotación o abuso sexual (SEA) son en gran medida una nefasta consecuencia de una devastadora realidad social y coyuntural de los escenarios de despliegue, y nuestra posición está en línea con la ONU, de cero tolerancia.

Es cierto que en el pasado existieron denuncias de supuestos casos de explotación sexual en Haití, los cuales fueron canalizados por ONU a nuestro país, y todos los casos fueron investigados. Debo aclarar que en ningún caso fueron denunciadas violaciones.

P: O sea, casos de paternidad, de niños nacidos a mujeres locales por relaciones con soldados de la fuerza de paz, pero no a causa de violación. Eso es algo totalmente distinto por cierto.

R: Respecto a los casos de presunta paternidad, ONU ha canalizado a nuestro país 11 denuncias, las cuales fueron investigadas en su totalidad. Solamente 4 de ellas arrojaron resultados positivos tras las pruebas de ADN. En esos casos los implicados han reconocido su responsabilidad e iniciado procesos para asegurar la manutención de los niños.

P: ¿El ejército ha tomado medidas al respecto? ¿Se ha hecho algo con los soldados en cuestión?

R: Desde la implementación de la política de "Tolerancia Cero" en 2003, el Ejército Nacional y todos los demás integrantes del Sistema Nacional que participan en Misiones de Paz no han cesado en sus esfuerzos por asegurar el cumplimiento de los estándares de conducta, por ejemplo generando capacitación y entrenamiento constante en la materia. En ese sentido, desarrollaron de manera temprana, en 2004, directivas sobre el relacionamiento con la población local y los procedimientos ante casos de SEA.

Uruguay se destaca por ser uno de los pocos estados miembros de ONU en poseer procedimientos claros de investigación ya que en 2014, nuestro gobierno aprobó el "Protocolo de Actuación del Estado Uruguayo ante denuncias de presunta paternidad comunicadas por la ONU y que involucran efectivos militares desplegados en Operaciones de Paz". Este fue presentado a la ONU mereciendo su reconocimiento por ser el primero en su especie y un modelo a seguir por otros países contribuyentes.

Finalmente, en los casos comprobados de SEA, se han tomado las medidas previstas por ONU, como la prohibición de participar en misiones, en lo interno se aplicaron medidas legales y disciplinarias correspondientes acorde a la gravedad del caso, incluyendo la baja; específicamente en los casos de paternidad comprobada, se ha proseguido con la acción civil de reparación.

 

*Entrevista originalmente publicada en el Semanario hebreo.