Falleció Vesna Vulovic, la azafata que sobrevivió a una explosión y a una caída de 10.000 metros

El 26 de enero de 1972, Vesna trabajaba como aprendiz en Yugoslav Airlines. Tenía 22 años y no le tocaba volar, pero un error en el armado de turnos la hizo subir en lugar de una colega.

El aparato, un McDonnell Douglas DC-9, despegó de Copenhague con rumbo a Zagreb. Cuando sobrevolaba la frontera entre Alemania y Checoslovaquia, se produjo una explosión a bordo.

Las Investigaciones posteriores achacaron el episodio a un terrorista independentista serbio a bordo. Sin embargo, una investigación periodística de 2009 afirma que el avión fue abatido por error por la fuerza aérea checa.

Tras el estallido el avión se despresurizó. Vesna quedó atrapada por un carrito de comida, mientras las personas a su alrededor salían despedidas.

Si bien la caída de la aeronave fue parcialmente amortiguada por árboles y nieve, la supervivencia de la mujer no puede considerarse menos que milagrosa, ya que el avión se precipitó desde más de 10.000 metros. Hasta la fecha, Vesna es la persona que ha sobrevivido a una caída desde mayor altura sin usar paracaídas.

De acuerdo a su entrada en el Libro Guinness, la joven se fracturó el cráneo, tres vértebras y ambas piernas. Estuvo 27 días en coma y 16 meses hospitalizada. Contra todo pronóstico, Vulovic se recuperó completamente y retomó su actividad laboral en la misma aerolínea, aunque en labores de oficina.

Interrogada acerca de si el terrible accidente tenía que ver con esa decisión, ella siempre aseguraba que la caída no le había dejado como consecuencia el miedo a volar, ya que no recordaba lo ocurrido.

La ex azafata fue encontrada muerta en su apartamento en Belgrado, donde vivía sola.