El expresidente del sindicato de empleados de OSE Federico Kreimerman llegó a un acuerdo con la Justicia en el caso que lo involucra por el encendido de una bomba de humo en la sede del organismo el 13 de junio de 2023, en el marco de una movilización gremial contra el proyecto Neptuno.
De acuerdo con información de Fiscalía, en audiencia se celebró un acuerdo reparatorio entre las partes que consiste en que Kreimerman “manifieste en sede penal sus disculpas por las consecuencias que el evento pudo haber ocasionado” y que, a su vez, exprese “su voluntad de que los conflictos se resuelvan en forma pacífica”.
La investigación del caso estuvo a cargo de la fiscal de Flagrancia Betina Ramos, quien sucedió a la hoy exfiscal Gabriela Fossati, quien había pedido la imputación de Kreimerman por un delito de atentado especialmente agravado. En agosto de 2023, se dispuso la obligación de fijar domicilio y no modificarlo sin previo aviso al juzgado.
Kreimerman, a través de su abogado, Juan Fagúndez, apeló la imputación de la Justicia.
El dirigente sindical realizó un descargo a través de redes sociales en el que manifestó que “quedó validado en la Justicia el acuerdo reparatorio en la causa”. “Durante todo el proceso, quedó en evidencia que nunca existió un delito de atentado. Esa acusación no se pudo sostener y terminó cayendo por sí misma”, indicó.
“El acuerdo firmado es de carácter simbólico. En mi calidad de presidente del sindicato en aquel momento, asumo personalmente los hechos vinculados a la manifestación en OSE en 2023, tal como está expresado en el texto”, agregó.
Según Kreimerman, “esto implica que no hay condena ni antecedentes y que nunca existió un delito de atentado”.
“Este desenlace muestra que los trabajadores podemos enfrentar una acusación injusta y salir con la frente en alto. Reafirmamos nuestro compromiso de seguir defendiendo el agua y los derechos de los trabajadores”, completó.