El martes, habían sido notificados 567 nuevos fallecimientos en 24 horas.

Por el contrario, este miércoles se reportaron más de 5.000 nuevos casos diarios de la COVID-19, un alza que terminó con seis días de baja. El país acumula un total de 177.633 de casos notificados.

Como dato positivo, el número de personas que han sido dadas de alta se elevó este miércoles a más de 70.000, lo que representa casi el 40% del total de casos confirmados.

Las autoridades sanitarias de España, tercer país país con más fallecidos por el coronavirus, han señalado que el pico de la epidemia quedó atrás, después de que se llegaran a registrar 950 muertes diarias y más de 8.000 nuevos casos el 2 de abril.

España mantiene desde el 14 de marzo uno de los confinamientos de la población más estrictos en Europa. Solo se permiten las salidas para trabajar, si no se puede hacer desde la casa, comprar comida o medicinas o pasear al perro.

El confinamiento se prolongará hasta el 25 de abril incluido, pero el gobierno de Pedro Sánchez ya adelantó que tendrá que ser mantenido.

El lunes volvieron a trabajar algunos sectores de la economía tras dos semanas de parón. Para prevenir un aumento en los contagios, miles de mascarillas han sido entregadas en el transporte público.

De todas maneras, el gobierno estima que un 67% de españoles cumple a rajatabla el confinamiento.

"Estamos tomando medidas duras que están teniendo eficacia, que están protegiendo, salvando vidas", estimó Pedro Sánchez este miércoles en el Congreso de los Diputados.

"Como consecuencia del confinamiento, estoy convencido de que los españoles dentro de muy poco recuperarán la normalidad (...), la nueva normalidad, porque nada va a ser igual como consecuencia de la COVID-19, hasta que encontremos la vacuna", dijo Sánchez, ante las críticas de la oposición que denuncian mala gestión de la crisis por parte de su gobierno.

aFP