Dispositivo para Rehabilitación se reunirá con Dinali para seguir en cárcel de Canelones

El Dispositivo de Ayuda para la Rehabilitación (DAR), que funcionaba en la Unidad 7 de Canelones se reunirá con autoridades de la Dirección Nacional del Liberado (Dinali) con el fin de volver a trabajar en ese centro penitenciario.

Según supo Montevideo Portal, el DAR trabajaba con un promedio de 100 a 120 privados de libertad en su rehabilitación hasta hace dos semanas. Este dispositivo estaba contratado por la dirección anterior de la Dirección Nacional del Liberado (Dinali), bajo la presidencia de Gustavo Silveyra, pero con el cambio de autoridad se evalúa la continuidad, aunque según supo Montevideo Portal seguirán trabajando en el centro carcelario.

Desde el Ministerio de Desarrollo Social (Mides), donde depende la Dinali, se informó a Montevideo Portal que el objetivo es reforzar la atención en los centros carcelarios con respecto a la rehabilitación. En ese sentido, en la Rendición de Cuentas el programa “Red de asistencia e integración social” con el fin de atender “situaciones de especial vulnerabilidad”.

En el proyecto también se destinará una partida de $ 354.000.000 a partir del ejercicio 2024, con destino al Programa de Promoción de la Salud Mental del Mides, para atender los consumos problemáticos de sustancias psicoactivas para personas con alta vulnerabilidad social, como personas en situación de calle o egresados del sistema penitenciario, que tendrá como objeto “impulsar la implementación de dispositivos de abordaje de salud mental y consumos problemáticos de sustancias psicoactivas, orientadas a la inclusión social de las personas con alta vulnerabilidad social, en articulación con los actores interinstitucionales competentes”.

En concreto con el DAR lo que ocurrió fue que incumplían con formalidades con respecto a su integración. Según informaron las citadas fuentes, no se cumplía con el decreto N° 274/013 del año 2013 con respecto al marco regulatorio para los establecimientos especializados en la atención y el tratamiento de “usuarios problemáticos de drogas”.

El texto señala que “es necesario para todos los dispositivos definir estándares de prestaciones mínimas con niveles de profesionalidad que amerite la habilitación de los servicios que se ofrecen”.

“La complejidad del abordaje del uso problemático de drogas supone la necesidad de una gama diversa de prestaciones, que cuenten con distintos niveles de especialización y profesionalización para abordar los diferentes momentos de la problemática y dar respuestas diferenciales a las necesidades de los ´Usuarios Problemáticos de Drogas´”, dice el decreto.

En ese sentido, “la regulación y control de estos dispositivos corresponde a la órbita del Ministerios de Salud Pública, Ministerio de Desarrollo Social, Ministerio de Educación y Cultura y Ministerio de Trabajo y Seguridad Social”.

“Se requiere reglar la realización de procedimientos diagnósticos y terapéuticos, así como establecer los contralores adecuados, que garanticen la calidad de atención de los usuarios, la pertinencia de los tratamientos y la promoción de procesos de reinserción social”, añade el decreto.

Además, establece que “sin prejuicio de reconocer los servicios que brindan las comunidades filosóficas y religiosas, así como las iniciativas no profesionales que dan respuesta social y de contención social y afectiva a usuarios problemáticos de drogas, es necesario que estas estén articuladas y vinculadas con los servicios de Atención y Tratamiento enmarcados en el Sistema Nacional Integrado de Salud”.

La idea es que se incorpore un profesional idóneo al DAR, pero que siga habiendo trabajadores del dispositivo. En el dispositivo trabajan operadores terapéuticos.

Diego Arciero, coordinador del DAR, dijo a Montevideo Portal que “al ser un servicio tercerizado para abordar problemáticas de consumo, se llegó a un acuerdo por medio del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR)”. “Con el Mides se evalúa la posibilidad de generar los contratos correspondientes y formalidades necesarias”, aseguró.

“Si bien no es deseable que se generen pausas es necesario para la organización y funcionar acorde a lo que las nuevas autoridades están buscando y pensando”, agregó. Arciero señaló que “los acuerdos van a salir” y se está “a la espera de la reunión con las autoridades”. “La expectativa es el próximo miércoles estar de nuevo trabajando en la unidad 7”, acotó.

Arciero comentó que “trabajar en el área penitenciaria es un desafío” para el dispositivo. “Hay unos 60 reclusos en un seguimiento de tres o cuatro meses” por parte del DAR.