El diputado colorado Felipe Schipani presentó un proyecto de ley en el Parlamento que propone modificar tres artículos de la Ley N.º 19.641 —que declara Sitios de la Memoria Histórica— para incluir en su definición no solo las violaciones cometidas por el terrorismo de Estado durante la dictadura, sino también aquellas ejercidas por organizaciones guerrilleras desde 1963.
La propuesta redefine el concepto de “sitio de memoria” como todo espacio donde hayan ocurrido violaciones a los derechos humanos por parte del Estado o de grupos armados, incluyendo delitos como “tortura, desaparición forzada, homicidio político, prisión indebida, violaciones y otros delitos sexuales, persecución política, destituciones o exilio”.
También incorpora lugares vinculados a “actos de resistencia y lucha por la construcción o recuperación democrática” y memoriales creados por familiares o comunidades.
Otro de los puntos centrales del proyecto es la delimitación del período histórico que se tomará en cuenta para la declaración de estos sitios: no solo la dictadura cívico-militar (1973–1985), sino también el período previo, desde agosto de 1963, cuando ocurrió el asalto del Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros (MLN - T) al Club Tiro Suizo.
Además, se contempla la posibilidad de incluir hechos posteriores o anteriores cuando se comprueben violaciones a los derechos humanos.
Schipani argumenta que “la memoria histórica debe ser honesta, integradora y plural”, y que hasta ahora ha primado “una lectura parcial” de los hechos, centrada exclusivamente en los crímenes de la dictadura.
“Ignorar o minimizar el sufrimiento causado por el accionar de grupos políticos armados equivale a legitimar una visión hemipléjica de la historia, una historia en la que solo ciertas víctimas son dignas de ser lloradas y ciertos crímenes dignos de ser repudiados”, señala en la exposición de motivos.
Para respaldar su propuesta, el legislador citó al propio Líber Seregni, quien reconoció en una entrevista de 2000 que “hubo violación a los derechos humanos comparable” entre lo que sufrieron los rehenes de la dictadura y las víctimas de secuestros cometidos por organizaciones guerrilleras.
“Es un llamado a la reflexión. Sin una toma de conocimiento real de lo que son los derechos humanos, no podemos coadyuvar a crear este clima colectivo que permita la mejor solución en el drama de los detenidos desaparecidos”, dijo el fundador del Frente Amplio en una entrevista con Néber Araújo.
La iniciativa también propone declarar el 19 de junio como “Día del Nunca Más” como única fecha conmemorativa impulsada por el gobierno nacional. La propuesta retoma un mensaje pronunciado por el expresidente Tabaré Vázquez en 2006, cuando llamó a hacer de ese día un símbolo del “compromiso con la paz y la tolerancia”.
“El 19 de junio no es un día al azar. Es el día en que nació el Padre de la Patria. Y debe ser también el día en que renazca el compromiso de todos con la convivencia pacífica, con la democracia y con la no violencia”, afirmaba entonces Vázquez, en un pasaje citado textualmente en el proyecto.
Para Schipani, transformar ese llamado en ley “significa transformar una aspiración moral en una política de Estado”. La iniciativa, según se expresa en la exposición de motivos, no busca borrar el pasado ni superponer conmemoraciones, sino “enriquecer el significado” de una fecha ya cargada de sentido, reafirmando el legado artiguista como guía para la reconciliación nacional.
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