Desde sus inicios como actor hasta convertirse en una de las voces más escuchadas de habla hispana, Daniel Habif recorrió un largo camino entre la vulnerabilidad, la fe y la palabra dicha con verdad. Su discurso, que fusiona espiritualidad, poesía y reflexión contemporánea, lo ha llevado a llenar teatros en toda América Latina y a convertirse en referente de una generación que busca sentido y propósito en tiempos de ruido digital.

En diálogo con Montevideo Portal, Habif anticipa su llegada a Uruguay con la gira Ascender World Tour, una propuesta que —como su nombre indica— habla de crecer, pero también de caer. “No hay ascenso sin derrumbe”, dice con la serenidad de quien conoce el peso de cada palabra. 

Cedida a Montevideo Portal

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Durante la charla, el autor de Inquebrantables y Las trampas del miedo reflexiona sobre el dolor como maestro, la búsqueda de armonía frente al equilibrio imposible, y la fragilidad humana en un mundo cada vez más dominado por algoritmos. “Ya hay máquinas que pintan, componen o escriben poesía, pero lo que está en juego no es la creatividad: es quién va a llorar con esos poemas”, advierte.

Con su tono pausado pero convincente, Habif también habla de educación, fe y empatía. “Un acto patriótico como latino es educar a los jóvenes para soportar el mundo que viene”, afirma. Y asegura que llega al país “con los prejuicios abajo, desarmado, con ganas de aprender del pulso de los uruguayos”.

Tu conexión con el público en América Latina creció de forma exponencial. ¿Cómo vivís ese proceso?
—No lo mido en números ni en países. Pongo más la mirada en el qué diré que en el qué dirán. No tengo una estructura detrás de mis textos; escribo desde lo que habita —o no habita— en mí. Quizás esa autenticidad sea lo que conecta con la gente.

Tu gira incluye el ascender. ¿Por qué elegiste esa palabra?
—Porque no hay ascenso sin derrumbe. Quise usarla de forma paradójica. El ascenso es ese impulso vital que nos lleva a buscar otra perspectiva, a evolucionar. Pero solo se asciende después de haber sido desarmado por la vida, cuando el dolor te rediseña y te deja frente a tu yo más puro.

¿El dolor es entonces una herramienta necesaria?
—No hay cosas hermosas sin dolor, sin romantizarlo. El dolor puede ser un maestro severo pero justo. Hay contextos inhumanos, como la guerra, en los cuales es difícil hablar de transformación, pero aun ahí he visto personas capaces de abrazar con dignidad. El ser humano tiene una rara capacidad de mantener una chispa de belleza incluso en medio del infierno.

También hablás de armonía más que de equilibrio. ¿Por qué esa diferencia?
—Porque no creo que la vida pueda ser equilibrada. La armonía, como en la música, surge cuando cada instrumento entra en su momento, con su volumen y su ritmo. No todo suena igual, pero todo puede sonar bonito. Así veo la vida.

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Venís por primera vez a Uruguay. ¿Qué esperás de esta visita?
—Voy desarmado, sin prejuicios. Quiero entender qué voy a aprender, qué voy a descubrir. Latinoamérica comparte heridas parecidas, aunque cada país las ritualiza distinto. Todos buscamos avanzar, pero seguimos siendo intolerantes con la forma de ser del otro.

En tus reflexiones aparece la inteligencia artificial. ¿Qué te preocupa de ese futuro?
—Ya existen algoritmos que crean arte, escriben poesía, componen música. La línea entre lo humano y lo artificial se borró. La pregunta ya no es qué van a hacer las máquinas, sino qué va a quedar de nuestra humanidad. En un mundo gobernado por máquinas, la única resistencia será la compasión.

La charla

El encuentro será el sábado 15 de noviembre en el Teatro Metro de Montevideo, donde Habif ofrecerá una conferencia cargada de inspiración, energía y reflexión.

Las entradas ya están a la venta a través de Red Tickets, con valores que van desde $ 2.900 a $ 4.500, y sectores VIP exclusivos con cupos limitados, que incluyen la posibilidad de participar en un Meet & Greet con el autor.

Autor de los bestsellers InquebrantablesLas trampas del miedo y Ruge —con más de un millón de copias vendidas—, Habif combina oratoria, arte escénico y psicología para ofrecer un mensaje profundo, emotivo y esperanzador.

Ascender es un llamado a levantarse, a reinventarse y a volver a creer en uno mismo. No importa cuán duro haya sido el camino, siempre se puede subir un peldaño más”, expresa Habif sobre su nueva gira.