Julieta Makintach renunció a su cargo como jueza en Argentina del Tribunal N.° 2 de San Isidro tras el escándalo que protagonizó al ser acusada de autorizar la filmación de un documental por el juicio sobre la muerte del astro argentino Diego Armando Maradona.

La renuncia fue presentada este martes, luego de que un jurado había aceptado de forma previa siete denuncias en su contra por el referido documental.

La jueza ya había sido apartada del caso Maradona.

“La presente decisión se inscribe en el contexto de los hechos de público conocimiento que han generado un profundo impacto institucional y social, con consecuencias no deseadas —las que lamento profundamente—, vinculadas al desempeño de mi rol jurisdiccional en un juicio oral de alta sensibilidad pública”, sostuvo la jueza al renunciar.

“Considero que en este momento mi mayor contribución a la reconstrucción del prestigio institucional y a la reparación de los errores cometidos es apartarme voluntariamente”, apuntó también Makintach.