La exintendenta de Montevideo y actual diputada del Frente Amplio, Ana Olivera, dejará su banca en la Cámara de Representantes tras un año en el cual fue una de las referentes de la bancada oficialista y mantuvo un rol negociador en el marco de la discusión del proyecto de ley de Presupuesto.
Olivera dejará su banca el 1° de marzo de 2026, luego de que este miércoles se comunicara su decisión. En su carta de renuncia, Olivera adujo que se trataba de un retiro programado, como parte de su intención de abrir camino a nuevas generaciones políticas.
“En el marco de los elogios, quiero decir que no me la creo. Lo que quiero decir es que nosotros, hombres y mujeres que hemos abrazado la militancia política, donde uno hoy está acá, mañana está en otro lado, y es igual; si hay algo que quiero decirles es que nunca aspiré a estar en ninguno de los lugares. Porque, aparte, en mi generación, empecé perdiendo y perdiendo siempre. ¿Entonces qué se iba a imaginar uno que después iba a tener las responsabilidades que tuvo? Era inimaginable. Y creo que esa es una de las cosas que uno debe poder transmitir, de lo maravilloso que es poder transformar la realidad desde cualquier lugar”, dijo Olivera en la sesión de este miércoles, en la que recibió el reconocimiento de distintos legisladores.
La dirigente comunista fue la primera mujer intendenta de Montevideo. Además, presidió la Cámara de Diputados y ocupó la cúpula del Ministerio de Desarrollo Social.
En su lugar, asumirá Natalia Díaz, quien en la actualidad es secretaria general de la Unión de la Juventud Comunista, según anunció el diputado del Partido Comunista de Uruguay, Bruno Giometti.