"Aún no hemos llegado a un punto a partir del cual podamos recomendar con seguridad, sin que plantee inquietudes, realizar viajes" al exterior, "es por ello que consideramos necesario prolongar la advertencia sobre los desplazamientos alrededor del mundo hasta mediados de junio", declaró el jefe de la diplomacia alemana, Heiko Maas, esta jornada en una conferencia de prensa en Berlín.

Estas restricciones están vigentes como consecuencia de la pandemia de covid-19, que ha provocado que la mayor parte de la flota de aviones del mundo quedase varada en tierra, así como realizar controles fronterizos más estrictos, e imponer medidas de cuarentena en la mayoría de los países.

Respecto a lo demás, todo está abierto. "Mantendremos muchas discusiones con nuestros socios europeos para coordinarnos a nivel internacional", añadió Maas.

"Todo dependerá de la evolución de la pandemia en Europa y otras partes", subrayó, y serán necesarias "semanas antes de que las cosas se normalicen".

En las últimas cuatro semanas, la principal economía europea repatrió a unos 240.000 turistas bloqueados en todo el mundo debido al brote de la epidemia del coronavirus, insistió el ministro.

El país no tiene intención de "repetir esto en el verano (boreal)", advirtió.

Aunque las vacaciones estivales comienzan a finales de junio en algunos estados regionales, esta medida podría poner en peligro los proyectos de muchos ciudadanos alemanes, quienes tradicionalmente pasan sus vacaciones en el exterior.

AFP