Las cuatro mayores patronales agropecuarias de Argentina reclamaron este miércoles al Gobierno de Alberto Fernández que intervenga en la huelga que desde la semana pasada afecta la actividad de puertos y plantas de molienda de oleaginosas del país suramericano.
La denominada Comisión de Enlace, que integran las cuatro principales organizaciones del sector rural, pidió al Ejecutivo que "arbitre los medios para que los puertos cerealeros vuelvan a funcionar".
La huelga fue iniciada hace una semana por la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (Urgara) y por la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, a los que luego se unió el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soea).
El cese de actividades en reclamo de un aumento salarial y mejoras en las condiciones laborales afecta las actividades de ingreso de granos y molienda en las terminales de varias empresas en diversos puertos de Argentina, uno de los mayores productores y exportadores mundiales de granos y derivados.
En un comunicado, las entidades agropecuarias expresaron su "alarma ante la paralización de los puertos cerealeros de todo el país que ya lleva una semana e impide la normal operatoria del comercio exterior".
Frente a esta situación, le pidieron al Gobierno argentino que "implemente las mesas de diálogo o las instancias necesarias para destrabar este conflicto que continúa irresuelto y perjudica, cada día que pasa, al sector y a la Nación".
"Los principales afectados por esta medida gremial somos los productores agropecuarios, que estamos en plena cosecha de trigo y de cebada, gran parte de la cual se destina a la exportación, a través de los puertos que hoy se encuentran cerrados", señaló la Comisión de Enlace.
SINDICATOS INSISTEN EN SU RECLAMO
El cese de actividades fue convocado tras el fracaso de las negociaciones con la representación patronal, que llevan varios meses, y luego de que el Gobierno dictara la conciliación obligatoria en varias ocasiones ante el llamado de los sindicatos a una huelga en ocasiones anteriores.
En un comunicado conjunto, los tres sindicatos que participan de la huelga insistieron este miércoles en su demanda de un ajuste salarial que al menos alcance al 35 % de la inflación proyectada para este año.
Precisaron que el salario inicial en su actividad es de 70.000 pesos (797 dólares), por debajo de la cesta básica que calculan en unos 93.000 pesos (1.060 dólares).
Asimismo, reclaman un ajuste salarial para el próximo año del 25 %.
"Mientras las empresas agroexportadoras acumulan ganancias extraordinarias año tras otro, enfrentamos los mismos problemas, dificultades, deudas y hacemos múltiples sacrificios para poder avanzar como la gran mayoría del país. No vivimos del trabajo ajeno, somos trabajadores y trabajadoras que luchamos por un salario digno para vivir", señalaron.
Fuente: EFE
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