Abogado tributarista explicó qué son las sociedades offshore

El abogado tributaristas, Carlos Loiaza, explicó en declaraciones al programa En Perspectiva que crear una sociedad offshore no constituye una ilegalidad en sí, aunque advirtió que quien la crea suele tener la necesidad de esconderle algo a alguien.

“Entre los fines lícitos que se suelen mencionar están: la capacidad operativa que pueden otorgar este tipo de jurisdicciones, porque tanto en sus servicios profesionales como en su plaza financiera tienen músculo para atender los requerimientos de los grandes inversores, y muchas veces la privacidad, la protección de la intimidad, muchas de estas plazas tienen un secreto bancario muy estricto. Muchos empresarios, legítimamente, querían preservar su identidad para protegerse, por ejemplo, de posibles secuestros o extorsiones en economías donde estos riesgos existen, o para planificar sucesoriamente, en el caso de querer organizar un patrimonio en el exterior para que sus herederos puedan acceder a él sin necesidad de pasar por la sucesión”, señaló el abogado.

Loiaza señaló que las sociedades “son vehículos jurídicos que permiten a los empresarios limitar su riesgo al capital que aportan, eso es perfectamente legítimo. De hecho si no fuera así no existiría gran parte de la riqueza en el mundo porque es el derecho que tienen los empresarios a limitar su riesgo”.

“El sentido común coincide con que la utilización mayoritaria de este tipo de vehículos es para esconderle algo a alguien, hay que ver si eso siempre es ilegal, muchas veces lo es. Normalmente en estas jurisdicciones no existe tributación por las rentas o por los activos que están fuera del territorio donde [las sociedades] son constituidas. Por ejemplo, Panamá: si esta sociedad tiene un inmueble que alquila en Miami y cuentas que generan intereses en Suiza, esos ingresos no van a estar gravados en Panamá”, añadió.

La filtración de los datos

“Estamos hablando de 11 millones de documentos, que refieren a 214 mil empresas y por lo tanto correos de la más diversa índole, imagínense un correo electrónico, un Word, un acta de una sociedad, hay que procesar esta información y es muy complejo procesarla, cruzar esa información y entender de qué se trata. Son documentos complejos. Ese trabajo lo vienen haciendo desde hace varios meses estos periodistas y ahora sacan a luz algunas de sus conclusiones, todavía parciales y fragmentarias. Es un fenómeno de filtración privada que no supone poder imputarle a nadie en concreto una actuación delictiva, pero que pueden ser el origen de investigaciones por parte de distintos países que lleven a imponer determinadas sanciones administrativas o inclusos penales. No estamos en esa instancia aún y, sin embargo, ya la proyección y la divulgación de la información genera un efecto infamante o perjudica la reputación de mucha gente”, afirmó Loiaza en declaraciones a Desayunos Informales, de Canal 12 .

Loiaza señaló que si bien puede parecer algo lejano “puede pasar mañana mismo con una conversación de whatsapp, hoy ya no hay donde esconderse, ese exhibicionismo, la gente se muestra mucho, la información no se puede proteger”.