El gerente del Área Estadística y Criminología Aplicada del Ministerio del Interior, Diego Sanjurjo, realizó un descargo ante el atentado de la fiscal subrogante de Corte, Mónica Ferrero.
“No somos excepcionales”, comenzó el dirigente del Partido Colorado y comparó la situación que atraviesa Uruguay con la del resto de la región. “Entre 1985 y 2025, Uruguay tuvo 22 ministros del Interior y 13 directores de la Policía Nacional. Pese a sus mayores esfuerzos, ninguno logró reducir los homicidios, y todos fueron testigos del crecimiento de los mercados ilegales y de un consecuente aumento de distintas formas de criminalidad”, expresó el jerarca.
De acuerdo con Sanjurjo, “prácticamente todos los países latinoamericanos recorrieron el mismo camino”. En ese sentido, el colorado dijo en su cuenta de X que los gobiernos “aumentaron cada quinquenio el presupuesto, el personal y los recursos de sus fuerzas de seguridad, solo para comprobar que el problema se volvía cada vez más grave y complejo”.
“Crecieron año a año los imputados y los presos, pero la violencia y la corrupción no disminuyeron. Incluso Chile y Costa Rica ya están atrapados en esta dinámica. Las únicas excepciones son regímenes autoritarios como Cuba y El Salvador, donde la solución fue suspender el Estado de derecho y la presunción de inocencia”, escribió.
Sanjurjo afirmó que “la evidencia internacional es clara desde hace décadas”. “Sin políticas preventivas y programas de resocialización a gran escala, el esfuerzo punitivo resulta inútil. Sin embargo, hasta hoy ningún país de la región ha asumido seriamente ese desafío”, reflexionó.
El director del Ministerio del Interior sostuvo que Uruguay “tiene una decisión que tomar”, ya que “mudarnos no es una opción”. “Podemos repetir la historia: polarizarnos en torno al populismo, exigir renuncias, pedir otra vez más policías y penas, siguiendo nuestra ruta fallida y la de nuestros vecinos. O podemos reconocer que precisamente esa combinación de polarización, populismo penal y abandono de las políticas preventivas y penitenciarias es lo que nos impide tener resultados”, sostuvo el jerarca.
Sanjurjo insistió en que “lo que está en juego no es solo la seguridad, sino la democracia misma”. “Chile y Costa Rica ya sucumbieron al populismo y la polarización. Ahora nos toca a nosotros”, concluyó.
En la madrugada del pasado domingo, dos delincuentes ingresaron a la casa de Ferrero, dispararon dos veces y rompieron varios objetos. Además, realizaron un pozo en el patio de la casa, por lo que por estas horas se está intentando descartar si dejaron un artefacto explosivo.
Hay dos personas detenidas, menores de 30 años, vinculadas a la banda narco de Los Albín.