El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, participó de la inauguración de un centro de tratamiento de adicciones en Tacuarembó el pasado viernes 19 de abril.

Allí, el mandatario insistió en la necesidad de “no dar un uruguayo por perdido”.

“¿Por qué digo esto? Porque hay causas que al principio a uno lo pueden enamorar, lo pueden mover y, con el paso del tiempo, quizás con los fracasos sucesivos, uno dice: ‘Bueno, agarremos las causas que son más conseguibles o más simples’. Ahora, cuando hablamos de no dar un uruguayo por perdido estamos hablando de las causas más difíciles. Cuando hablamos de las causas más difíciles, ¿qué estamos diciendo? Los problemas que puede tener una persona en nuestro país y las herramientas que no tiene para resolverlos”, reflexionó Lacalle al hacer uso de la palabra.

De esta manera, aseguró que se está ante “un tema hipercomplejo” porque “la adicción es la consecuencia, no la causa”. “Por eso es muy importante no solo la técnica, no solo la pericia, no solo la medicina, sino que el amparo afectivo en el tratamiento de las adicciones es fundamental”, enfatizó.

Así, el jerarca eligió destacar a los funcionarios que trabajarán en el nuevo centro de tratamiento de adicciones de Tacuarembó. Según sostuvo Lacalle, si no trabajan “a corazón abierto, con entrega [y] sabiendo que una y otra vez quizá alguno que está a punto de agarrar un camino tiene un tropiezo” se puede volver “una tarea demasiado frustrante”.

“Por eso agradecerle a todos los funcionarios que van a trabajar acá y tenemos que pedirles que no bajen los brazos. Para nosotros son importantísimos en esta tarea”, concluyó el mandatario.