Contenido creado por Gerardo Carrasco
Internacionales

El insulto y la herida

“Negro de mierda”: nuevo testigo termina de hundir a los rugbiers de Gesell

El joven aseguró que la agresión fue gratuita, que hubo otra persona golpeada e insultos racistas.

28.01.2020 12:01

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2020-01-28T12:01:00-03:00
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En las últimas horas, un joven de 20 años declaró en el caso del asesinato de Fernando Báez Sosa, muerto a golpes el pasado 18 de enero en un boliche del balneario bonaerense de Villa Gesell.
Si bien numerosos testigos aportaron sus declaraciones, el testimonio de este joven sería importante debido a su falta de vinculación con las partes involucradas.

"Hasta ahora teníamos las declaraciones de los amigos de Fernando, que si bien lo hicieron bajo juramento de decir verdad tenían vinculación con la víctima. Este testigo es el primero que declara en la causa sin tener relación con ese grupo", dijo una fuente judicial en declaraciones al portal Infobae.

En términos generales, dicho testigo habría ratificado lo ya manejado en la causa: que la agresión se produjo arbitrariamente y no en el marco de una pelea, que Báez sosa fue golpeado en el piso -algo que se aprecia en las filmaciones- al igual que uno de los amigos que lo acompañaban, y que luego de terminar de golpearlo, uno de los agresores le gritó "negro de mierda".

El nuevo testigo hizo una descripción física de los agresores, también coincidente con los otros testimonios.

"Se trata de un testigo presencial de los hechos y es dramático el relato que hace", dijo el lunes el abogado Fernando Burlando, patrocinador de la familia de la víctima, después de la declaración. "Queda prueba pendiente y mucha gente que seguro vio este episodio y aún no se animó (a declarar). Los estamos esperando para abrazarlos, contenerlos y decirles que si vienen o aportan algo, le están haciendo un gran bien a la sociedad toda", invitó.

Los diez rugbiers acusados por el crimen son Lucas Pertossi (20 años) Matías Franco Benicelli (20), Ayrton Michael Viollaz (20), Máximo Pablo Thomsen (20), Luciano Pertossi (18), Alejo Milanesi (20), Tomás Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19), Ciro Pertossi (19) y Blas Sinalli (18).

Ciro Pertossi y Thomsen están imputados como autores de los puntapiés propinados a la víctima cuando ya estaba en el suelo, y que habrían resultado letales. A los otros ocho se los acusa de haber sido partícipes necesarios del crimen, porque agredieron a los amigos de la víctima para impedir que le prestaran auxilio. El delito por el que están detenidos es el de homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas que tiene una única pena, la prisión perpetua.