“Los voy a matar”: por qué la Policía no detuvo a Gustavo Albín tras la muerte de su hijo

El 19 de enero, cuando se produjo el asesinato de un niño de 8 años, la Policía vio a Gustavo Albín en su casa. Los efectivos habían aumentado el patrullaje en la zona, bajo el temor de que la familia liderada por el delincuente tomara represalia contra los Suárez, el otro clan con el que se disputa el territorio por la venta de droga en Villa Española. 

La Policía informó que divisaron a Albín, padre del menor asesinado, frente a su vivienda. De acuerdo a lo consignado por Telemundo y confirmado por Montevideo Portal, el líder de la familia estaba rodeado por ocho hombres que comenzaron a increpar a los funcionarios. 

“Me están buscando ustedes, manga de perros, los Suárez mataron a un niño, ahora sí se va a pudrir el Villa Española. Váyanse de acá porque los voy a matar a todos”, dijo Albín.

Ante esta situación, los encargados del patrullaje decidieron solicitar apoyo para poder detener a Albín, pero este junto a los ocho individuos ingresaron a su casa para tirarles botellas y piedras. 

Tras esto, algunas mujeres salieron de la vivienda hacia la calle y volvieron a increpar a los efectivos. Los policías optaron por no actuar, para evitar que la situación pasara a mayores. 

Esta semana, Albín se entregó ante la Policía para pedir justicia por la muerte de su hijo. La fiscal de Homicidios de 3° Turno, Adriana Edelman, encabezó el pasado martes una audiencia en la se imputó al delincuente por el homicidio de Ezequiel Suárez, el joven de 21 años asesinado frente a su casa.