El accidente del avión de Air India, que dejó más de 240 muertos y un milagroso sobreviviente que salió caminando, es ahora indagado por un grupo de investigadores que busca determinar los motivos que llevaron a la catástrofe registrada solo 40 segundos después del despegue.

Las investigaciones están centradas en examinar los restos del avión, así como en las grabaciones de voz de la cabina. Entre otros aspectos, serán evaluados también los filtros de combustible, los conductos, las válvulas y el combustible residual para comprobar si hay contaminación, así como los vuelos anteriores de esa aeronave y de su tripulación.

El informe preliminar debe publicarse en un transcurso de 30 días, y el definitivo en un plazo de 120 jornadas.

La última transmisión de la cabina fue un llamado de auxilio. Luego, el avión perdió altura y se estrelló.

El capitán Kishore Chinta, antiguo investigador de la Oficina de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB) de la India, calificó este accidente como “el más raro de los raros”, según dijo en diálogo con la BBC.

“Estas investigaciones son extraordinariamente complejas. Llevan tiempo, pero habrá indicadores tempranos de lo que probablemente salió mal”, dijo, por su parte, Peter Goelz al medio británico, exdirector de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de Estados Unidos.

Las hipótesis son varias y van desde una falla de los motores, mantenimiento incorrecto, acción involuntaria de la tripulación que haya cortado el suministro de combustible a ambos motores o el despliegue incorrecto de los flaps.

De acuerdo con las consultas del medio británico con distintos expertos en aviación, las primeras pistas sobre lo acontecido pueden partir de los restos de los dos motores.

“A partir de los daños se puede saber si los motores estaban generando energía en el momento del impacto: las turbinas se fracturan de forma diferente cuando giran a gran velocidad”, afirmó Goelz. Esto podría ser una pista crucial, ya que “si los motores no estaban produciendo energía, los investigadores tienen un caso grave entre manos y el foco se desplazará bruscamente a la cabina”.

En cuanto a lo ocurrido en la cabina, para eso será fundamental examinar la caja negra, que recopila desde las llamadas de radio de los pilotos hasta el sonido ambiente de la cabina. Esto también podría entregar información valiosa sobre la posición de las palancas de tren de aterrizaje y flaps, el rendimiento del motor y el flujo de combustible, entre otros.

Por su parte, si se determinan problemas en el sistema de control de gestión de vuelo, esto podría suponer un grave problema para el fabricante Boeing.