¿Acortar el ciclo electoral? El debate sobre su extensión y la posición de los partidos

La reforma constitucional de 1996 marcó una serie de cambios en la historia de la vida electoral, entre los que se encuentran la segregación temporal de las elecciones nacionales y las departamentales. En las últimas horas, en el marco de los comicios de este domingo 11, varias figuras políticas se refirieron al respecto, mostrando de manera casi unánime que el proceso electoral es largo.

El presidente de la República, Yamandú Orsi, dio su posición esta mañana en rueda de prensa. “A partir de la separación de las elecciones quedó demostrado que la ciudadanía vota partidos y vota personas. En las departamentales tienen la opción de cambiar o de ir por otro camino. Si se le diera la chance a la gente de votar el municipio con opciones distintas yo creo que lo haría. Serían tres hojas”, dijo.

“Es muy polémico, pero no hay que subestimar a la gente. No es que la gente no entienda. La libertad del elector quedó demostrada: la sabe utilizar. Estamos lejos de eso, implica una reforma compleja. La gran virtud de la separación fue la libertad que se le da al elector de ir por partidos distintos. ¿Qué pasa si eso se le permite dentro del sobre?”, agregó.

Por su parte, el senador por el Partido Colorado y secretario general de esa colectividad, Andrés Ojeda, coincidió con Orsi y señaló que “la campaña departamental siempre queda un poco fría porque el proceso electoral es eterno”. “La gente está aburridísima de lo largo que es y no le da bola a esta campaña departamental. En la calle no hay ambiente, la gente está cansada y tiene derecho”, puntualizó.

Mientras tanto, el senador nacionalista Javier García remarcó las dificultades que implicaría realizar una reforma constitucional, aunque se refirió a la longitud de la campaña. “Los partidos tenemos que achicar las campañas y la intensidad”, dijo. De todas maneras, una reforma lograría sumar “a este desgaste, porque es otro proceso más”.

Uno de los que no se manifestó al respecto es el expresidente Luis Lacalle Pou. “Yo no tengo muchas cosas para decir hoy. Todo el mundo habla de eso. No quiero caer en lugares comunes. No sé si es largo o corto, pero hablar de eso el día de la elección no me parece”, señaló.

Por su parte, el expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera también se manifestó al respecto. “Elegir en materia departamental y local es bastante más fácil que cuando se elige en lo nacional. Esto es bien simple, es calidad de vida. Lo municipal tiene que estar desprovisto de todo lo que sea otra contaminación de valores”, subrayó.

  Una encuesta realizada a los lectores de Montevideo Portal, bajo la pregunta de “¿cree que las elecciones departamentales deberían celebrarse junto a las nacionales, como se hacía antaño?”, manifiesta que el 70,71% cree que “resultaría más práctico”, un 24,45% cree que “no, deben ser procesos electorales separados”, un 2,23% que optó por la opción “no lo sé”, un 2,12% que “no me interesa” y un 0,48% “otra”.  

En el mes de abril, Montevideo Portal consultó sobre este tema a Mariana Pomiés (directora de Cifra), Rafael Porzecanski (director de Opinión Pública y Estudios Sociales de Opción Consultores) y Eduardo Bottinelli (director de Factum).

Pomiés, por un lado, fue tajante en su postura. “Creo que ya aprendimos que son cosas bien distintas. La gente las vive distinto, les da otra libertad a los candidatos. Las campañas son distintas. Creo que está bien así, que fue un gran acierto separarlas y que eso es bueno”, sostuvo.

Porzecanski, sin embargo, fue más mesurado en su opinión. “Me gustaría escuchar argumentos en pro y en contra. Obviamente, un argumento a favor puede ser la reducción del tiempo del ciclo electoral. De algún modo está el cansancio de los electores; se hace largo. Al final se está en campaña 15 meses del ciclo electoral de 60, que es lo que dura el mandato, un 25% del tiempo”, reflexionó.

Además, agregó que “también hay un ahorro de costos si se hicieran [elecciones] simultáneas, porque es un operativo logístico importante”.

Sin embargo, apuntó que “uno podría argumentar que la gestión municipal o departamental merece un lugar protagónico, y que eso podría quedar un poco oscurecido si uno entra a una campaña nacional”.

“No creo que sea un asunto que tenga una respuesta clara. Es un debate más de tipo normativo”, concluyó.

Por último, Bottinelli cuestionó la aplicación de la reforma electoral y alegó que en su momento “faltó trazar una línea continua de qué significaba cada instancia” del ciclo electoral.

El director de Factum ilustró este concepto con la diferencia que existe en la forma de candidatearse entre la elección nacional y la departamental. “Por un lado, en la elección nacional con voto obligatorio —que tiene unas reglas que implican 50% para que no haya segunda vuelta— se hace la elección legislativa junto con la presidencial, con candidaturas únicas. Y después, por otro lado, pasamos a esta elección separada, departamental y municipal, donde el voto es obligatorio, pero las candidaturas son múltiples y no hay segunda vuelta. Entonces, yo creo que el sistema necesita revisarse en su conjunto”, considera.

En esta línea indicó que, de todas maneras, una de las bondades de la separación entre elecciones es la posibilidad del “voto cruzado” entre partidos, que, dada la distancia temporal, evita el arrastre de votos del candidato nacional al departamental.

“Además, la elección departamental es justo a los dos meses y poco de que asume un gobierno y eso ya ensucia un poco el arranque. Creo que hay que pensarlo, si van a seguir siendo separadas, en qué cronograma, y cómo va a dialogar eso con las otras instancias del ciclo electoral”, sentenció.