En Punta del Este se está "resucitando" un proyecto "dado por muerto": la Torre Trump.

Según informa la compañía de medios Bloomberg, un grupo de propietarios de apartamentos, tenedores de bonos, proveedores y otros inversionistas respaldan un plan de rescate para un proyecto que se encuentra estancado.

"El desarrollador argentino de la torre se ha quedado sin dinero, la construcción se detuvo en octubre de 2019 y el proyecto está en proceso de reestructuración", señala el citado medio.

Además, informan que la mayoría de los propietarios actuales quieren mantener el nombre de Trump estampado con letras doradas masivas en el frente de la torre, según Rolando Rozenblum, uno de los propietarios de apartamentos que impulsa el acuerdo.

"El nombre Trump sigue siendo una marca inmobiliaria global válida", dijo Rozenblum, director ejecutivo de International College, una escuela privada en Punta del Este. "Ofrece un tipo de importancia que se merece un proyecto con este nivel de calidad", agregó.

Un renacimiento sudamericano llegaría en un momento bienvenido para la Organización Trump, la compañía de bienes raíces del expresidente.

El sitio web de la Organización Trump, que no respondió a las solicitudes de comentarios, enumera la torre de Uruguay como su único proyecto en América Latina.

Como ahora es común para la empresa, la Organización Trump no construyó ni desarrolló la torre en Uruguay; simplemente alquiló el nombre de Trump.

Su antiguo desarrollador, YY Development Group, con sede en Buenos Aires, una vez calificó el proyecto como "la torre más exclusiva de América del Sur".