La empresa de pagos digitales PayPal anunció un acuerdo con OpenAI para integrar su billetera electrónica en ChatGPT, el sistema de inteligencia artificial que actualmente cuenta con más de 700 millones de usuarios semanales en todo el mundo. La alianza representa un paso clave en la expansión del chatbot hacia el comercio electrónico integrado.

El anuncio fue confirmado por el CEO de PayPal, Alex Chriss, en declaraciones a CNBC, donde detalló que los usuarios podrán utilizar la función “Comprar con PayPal” directamente desde la plataforma de ChatGPT, accediendo a una experiencia de compra segura, automatizada y asistida por IA.

“Tenemos cientos de millones de usuarios fieles de billeteras de PayPal que ahora podrán disfrutar de una experiencia de pago segura directamente desde ChatGPT”, afirmó Chriss.

De la conversación a la transacción

La integración, prevista para comenzar en 2026, permitirá que tanto compradores como comerciantes realicen transacciones sin salir del entorno conversacional de ChatGPT. Esto se suma a otros acuerdos recientes de OpenAI en el ámbito del comercio digital, incluyendo integraciones con plataformas como Shopify, Etsy y Walmart, consolidando al chatbot como un nuevo canal de ventas inteligente.

OpenAI avanza así en su estrategia de convertir ChatGPT en una interfaz comercial, capaz de asistir al usuario en la búsqueda, comparación y adquisición de productos o servicios, todo en una única experiencia conversacional.

Impacto en el sector financiero y tecnológico

Tras conocerse la noticia, las acciones de PayPal registraron un alza superior al 10 % en las operaciones electrónicas previas a la apertura de Wall Street, reflejando el entusiasmo del mercado ante la perspectiva de que la billetera digital gane protagonismo en el ecosistema de pagos potenciados por inteligencia artificial.

Desde el punto de vista tecnológico, esta integración marca un punto de inflexión: la IA conversacional comienza a operar como plataforma de transacciones reales, no solo como asistente informativo, lo que podría modificar profundamente los hábitos de consumo digital a nivel global.

Con información de EFE