En los últimos tiempos, la ciudad de Lisboa ha venido afrontando un complejo problema de vivienda. La capital portuguesa está "de moda" en Europa, algo que ha hecho que hasta la estrella del pop Madonna se mudara allí.

En la actualidad, el precio del metro cuadrado en la ciudad es por lejos el más alto del país, y rivaliza con urbes históricamente muy cotizadas, como París o Berlín.

Además, el enorme flujo turístico que ha recibido en los últimos diez años ha disparado un fenómeno de gentrificación y la proliferación de los apartamentos dedicados a alquileres temporales vía Airbnb y otras plataformas.

Ahora, la Cámara Municipal de Lisboa (CML) se dispone a llevar adelante una medida que podría significar un alivio para el lisboeta medio, que a menudo se ve obligado a pagar un precio exorbitante por un alquiler en un barrio relativamente céntrico, o mudarse a los suburbios. De hecho, incluso los alquileres en Almada -ciudad situada en la margen sur del Tajo y "dormitorio" de Lisboa- han experimentado una notoria suba.

Mediante una nueva iniciativa, el gobierno de la ciudad alquilará casas en el mercado y luego las subarrendará a precios asequibles. Para los propietarios, el municipio "ofrece inversiones seguras y sin riesgos" y quienes subalquilan a través de la CML "tendrán propiedades que están en buenas condiciones, adecuadas, a un precio asequible", explicó el alcalde de Lisboa, Fernando Medina, en declaraciones al periódico local Observador. En la actualidad, Medina está esperando la aprobación del presupuesto anual para avanzar con el nuevo programa.

En sus declaraciones, el jerarca detalló que quienes alquilen a la CML pagarán "precios que oscilan entre 150 y 800 euros", dependiendo de la categoría en la que esté clasificado el inmueble, ya que los habrá de diversos tamaños y comodidades, y en diversos barrios. El papel del gobierno será subsidiar la diferencia entre el alquiler que paga por la propiedad, en contratos de al menos cinco años, y lo que posteriormente se le cobrará al inquilino.

A modo de ejemplo, el alcalde dijo que: "Un monoambiente que podemos alquilar hasta 450 euros, lo subalquilaremos a 150 o 200 euros. El máximo que el inquilino paga es un tercio de su salario neto familiar ".

Este mismo año, Fernando Medina espera poder incluir unas mil viviendas en este programa.

En la primera fase de este proceso, CML alquilará las casas en cuestión a precios de mercado, aunque primero realizará una licitación que tiene la intención de reducir estos valores. Pero el alcalde garantiza que el propietario recibirá "una cantidad adecuada en relación con las condiciones del mercado". Interrogado acerca de que esto pudiera contribuir al crecimiento de la "burbuja inmobiliaria", el funcionario argumentó que el programa tendrá una tabla con uno topes máximos que la CML admitiría pagar, según el tipo de propiedad. Además, los propietarios podrían beneficiarse de reducciones impositivas.