El gigante tecnológico Meta, matriz de Facebook e Instagram, fue condenado por un tribunal mercantil de Madrid a pagar más de 620 millones de dólares a medios de comunicación españoles por competencia desleal y uso indebido de datos personales entre 2018 y 2023. La sentencia, celebrada como “histórica” por la Asociación de Medios de Información (AMI), podría sentar precedentes en el marco europeo sobre el control del poder digital y la defensa del ecosistema informativo.
Según el fallo, Meta habría obtenido beneficios millonarios al segmentar publicidad digital mediante un "perfilado masivo del comportamiento de los internautas" sin obtener el consentimiento adecuado, infringiendo el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea, vigente desde mayo de 2018.
Daños cuantificados y falta de transparencia
El tribunal fijó en 479 millones de euros (unos 550 millones de dólares) la indemnización que Meta deberá pagar a los 83 medios agrupados en la AMI —entre ellos El País, El Mundo, ABC y La Vanguardia—, más 60 millones en intereses legales y otras sumas menores a medios como Europa Press y Radio Blanca. La cifra se calculó en base a las "ganancias no percibidas" por estos actores debido a la actuación ilegal de Meta en el mercado publicitario español.
Durante el proceso judicial, Meta no aportó sus cuentas específicas en España, lo que obligó al tribunal a basarse en datos estimativos de ingresos generados por publicidad en línea, calculados en más de 5.280 millones de euros en el período analizado. Según la sentencia, parte de estos ingresos fue obtenida infringiendo normas europeas, lo que dio a la empresa “una ventaja competitiva significativa”.
Meta rechaza la sentencia y apelará
En un comunicado, la compañía tecnológica calificó el fallo de “infundado” y carente de pruebas concretas sobre un daño real a los medios. También sostuvo que ignora el funcionamiento habitual del ecosistema de publicidad digital y anunció que presentará una apelación.
La defensa de Meta argumentó que sus inversiones tecnológicas, más que los datos personales, explican la efectividad de sus anuncios. Sin embargo, el tribunal consideró probado que la captación de datos sin consentimiento permitió a Meta ofrecer productos publicitarios a precios y niveles de segmentación imposibles de igualar por medios tradicionales, distorsionando así el mercado.
Con información de EFE