¿Comer ananá para mejorar la digestión en Navidad? Un truco natural contra la pesadez

Las cenas de Navidad y Año Nuevo suelen estar marcadas por platos contundentes y ante los excesos, siempre se recomienda priorizar el consumo de frutas frescas como postre para evitar la pesadez y mejorar el bienestar general. En este contexto, hay una fruta que se posiciona como la opción preferida para alivianar la pesadez estomacal: el ananá.

Asado, cordero, lechón y las clásicas ensaladas con mayonesa, o los turrones y el pan dulce, que siempre acompañan hacen de las cenas de las fiestas tradicionales un claro peligro de atracón.

Aunque el ananá no integra la Lista Inteligente (reservada para la producción nacional como el durazno o el melón), es una de las frutas más buscadas por estas fechas. Su alto contenido de agua y fibra la convierte en un hidratante natural ideal para las altas temperaturas de nuestra temporada estival.

Pero además, su consumo en las Fiestas es estratégico, ya que la bromelina que contiene esta fruta ayuda a procesar las proteínas de las carnes típicas de nuestra mesa, facilitando una digestión que suele ser pesada en estas fechas.

La clave del ananá para una digestión ágil

El beneficio principal de esta fruta tropical reside en la bromelina. Se trata de un complejo de enzimas que actúa “rompiendo” las cadenas de proteínas, facilitando su absorción en el tracto gastrointestinal.

Cuando consumimos carnes pesadas, el sistema digestivo puede tardar horas en procesarlas. Al ingerir ananá, la bromelina actúa como un refuerzo, acelerando el vaciado gástrico y reduciendo esa sensación de inflamación tan común tras los banquetes navideños.

En Uruguay, el ananá es un clásico de la temporada estival, pese a que no sea una fruta típica de la cosecha local.

Cómo consumirlo ananá para que ayude a la digestión

Para que la bromelina cumpla su función, los especialistas en nutrición sugieren seguir estas pautas:

-  Siempre fresco: El ananá en conserva o en almíbar pierde sus propiedades digestivas. El proceso de industrialización aplica calor, lo que destruye la bromelina. Para ayudar a la digestión, el ananá debe ser natural.

-  No tires el corazón: Aunque es más duro, el centro del ananá concentra la mayor cantidad de enzimas. Lo ideal es picarlo bien chiquito e integrarlo al resto de la pulpa.

- La ración justa: Con dos rodajas después de la comida es suficiente. El exceso de acidez podría ser contraproducente, especialmente en personas con antecedentes de gastritis.

Algunas advertencias respecto al consumo de ananá

Pese a todos sus beneficios, es importante tomar en cuenta que no es bueno mezclar el ananá con lácteos, ya que la bromelina corta las proteínas del lácteo y deja un sabor amargo.

Además, debido a su acidez y a la presencia de estas enzimas, el ananá puede generar una leve picazón en la lengua. Se recomienda beber un poco de agua después de comerlo para neutralizar este efecto.