En un mundo en el que la incertidumbre económica marca la agenda global, la protección de los ahorros se ha convertido en una prioridad. El declive en el precio del dólar, el desplome de diversos fondos de inversión y las fluctuaciones de bonos y acciones dejaron en jaque a miles de personas que buscaban hacer crecer su patrimonio.
Opciones que durante mucho tiempo fueron consideradas seguras hoy ya no garantizan la estabilidad deseada, lo que genera un panorama de incertidumbre. Frente a esta situación, surge una pregunta inevitable: ¿cómo proteger el capital de forma efectiva?
La seguridad de un sector previsible
En este escenario, muchos ahorristas encuentran en el real estate una alternativa sólida para resguardar su capital. La inversión en bienes raíces no solo preserva el poder adquisitivo, sino que además protege de la inflación y genera rentabilidad a través de alquileres o la propia revalorización del inmueble.
Así, comprar propiedades se convierte en una manera de transformar los ahorros en un activo tangible, estable y con potencial de crecimiento a largo plazo.
¿Los uruguayos ahorran en ladrillos?
Sí, los inmuebles son cada vez más un instrumento de ahorro e inversión que se consolida entre los uruguayos. Ofrece seguridad tanto para quienes buscan una vivienda propia como para quienes invierten en busca de ingresos por alquiler o valorización a largo plazo.
En Montevideo, donde ocurre la mayor actividad inmobiliaria del país, la rentabilidad por concepto de alquiler se encuentra en un rango de entre 5% y 6% anual. En cuanto a las tipologías, los apartamentos monoambientes y de un dormitorio son los más buscados en el portal InfoCasas: más del 70% de la demanda de apartamentos se concentra en este segmento.
Rentabilidad por barrio
En InfoCasas realizaron un estudio sobre rentabilidad basada en alquileres en el que se habla de los diferentes barrios de la capital de acuerdo a los datos actualizados a junio de 2025. Esta comparativa muestra las distintas rentabilidades brutas por alquiler en cada zona. Recordemos que la rentabilidad bruta se calcula dividiendo el ingreso anual por alquiler entre el precio de compra del inmueble, sin considerar impuestos ni gastos.
Imagen: cedida a Montevideo Portal
Como sucede en toda inversión, a mayor retorno, mayor es el riesgo. En los barrios más demandados por el público, como Punta Gorda (4,9%), La Blanqueada, Cordón, Punta Carretas y Parque Rodó (5,0%), Pocitos (5,5%) o Parque Batlle (5,6%), la rentabilidad bruta se ubica en torno al 5% y 6%, cifras moderadas en comparación con otras zonas.
Sin embargo, esta menor rentabilidad se ve compensada por una demanda sostenida, bajos niveles de vacancia y un mercado de alquiler mucho más dinámico, lo que asegura estabilidad y menor riesgo para los inversores. Estos barrios siguen liderando como las opciones más buscadas por inversores que priorizan estabilidad y valorización sostenida y previsible a largo plazo por sobre el retorno inmediato.
En contraste, barrios periféricos como Manga (13%), Casabó (12%), Las Acacias (11,5%) o Nuevo París (10%) muestran los porcentajes de rentabilidad más altos. Si bien estos números pueden resultar atractivos a primera vista, se trata de zonas con menor demanda sostenida y mayor volatilidad, donde los períodos de vacancia suelen ser más prolongados.
Entre ambos extremos se encuentran zonas intermedias como Aguada, Goes y Unión (6-7%), Ciudad Vieja (6,4%) o Villa Española (6,5%), que ofrecen un balance entre rendimiento y estabilidad, aunque con menor consolidación que los barrios más tradicionales.
Podés ver el informe completo sobre rentabilidad y descargarlo en este link.
El mercado de alquileres: estabilidad y crecimiento sostenido
El comportamiento del precio promedio de los alquileres en Montevideo confirma por qué el real estate sigue siendo uno de los refugios de valor más seguros. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), desde enero de 2022 hasta julio de 2025, los valores de arrendamiento han mostrado una tendencia claramente ascendente, con un incremento cercano a $4.000 en promedio, en poco más de tres años.
Imagen: cedida a Montevideo Portal
En julio de 2025, el alquiler en pesos corrientes registró una variación mensual de 0,46% y un crecimiento acumulado de 5,5% en los últimos 12 meses, lo que refleja un mercado en alza y con una evolución consistente. Más allá de las oscilaciones puntuales, la línea de tendencia evidencia un crecimiento firme y constante, que se traduce en previsibilidad y seguridad para los inversores.
Este comportamiento ratifica que los bienes raíces ofrecen una combinación difícil de igualar: un activo tangible, con rentabilidad estable y con un valor que crece de manera sostenida en el tiempo.
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