Varios miles de hectáreas se han visto afectadas en las últimas 48 horas por decenas de incendios en áreas boscosas y residenciales en distintas partes del territorios nacional.

El principal siniestro se dio en las ultimas horas en la localidad de Algorta, departamento de Rio Negro a la altura del kilómetro 61 de la Ruta 25. Los datos oficiales aportados por el intendente Omar Lafluf hablaban de 1.500 hectáreas afectadas, pero un reporte del Ejército llegó a manejar 5.000 hectáreas, de las cuales 1.200, según se añadió, pertenecen a la empresa Montes del Plata.

Otro de los incendios tuvo su origen en un establecimiento rural de Soriano, afectando ambos lados de la Ruta 24. Oros eventos de importancia ya contralados ocurrieron en Neptunia donde fueron abarcadas nueve hectáreas, con otras 4 también en la zona del Fortín de Santa Rosa, donde llegaron a trabajar más de 200 bomberos, con el apoyo de drones de la Fuerza Aérea y el Ejército.

También se reportó un fuego en un campo privado de Parque del Plata norte. En estos casos se maneja el factor humano como principal causa.

Sobre esta serie de incendios que se está registrando en todo el país, En Perspectiva habló con Pablo Benítez, jefe de Prensa y Relaciones Públicas de la Dirección Nacional de Bomberos. 

El vocero de la fuerza dijo que han sido días "bastante complicados" dada la extensión y cantidad de los focos que se registran en distintos departamentos. "En la noche los incendios que estaban más complicados continuaron propagándose, tanto en Paysandú como en la costa de Canelones", explicó, comentando que no están controlados los incendios próximos a la localidad de Algorta. "Está avanzando de forma violenta, ya lo que ayer eran 1.500 hectáreas, hoy son de 3.500 a 4.000. Se propagó en forma violenta, muy rápida, hubo gente que incluso se autoevacuó en los centros poblados, porque la temperatura y el humo que se percibió era brutal", dijo. 

Explicó que la única forma de combatir las llamas en incendios de estas proporciones es creando "cortafuegos" es decir, franjas de tierras del ancho de una calle para generar claros entre la vegetación, de forma que no se propague el fuego entre las copas de los árboles. Sin embargo, la amenaza en estos casos es la temperatura y el hecho que un elemento incandescente o pavesa salga del incendio e inicie un nuevo foco ígneo en otra área, llegando a veces a distancias de un kilómetro. "Una brisa que te desplace un elemento encendido con el microclima que se genera en el incendio y la temperatura irradiada desde allí, la vegetación próxima también va adquiriendo esa temperatura. y se va haciendo cada vez más propensa a que se inflame", comentó.

Sostuvo que si bien se está trabajando con helicópteros de la Fuerza Aérea y de las brigadas aerotransportadas, así como con otros pertenecientes con las empresas forestales, "no es suficiente" porque "no se apaga con agua este tipo de incendios", refiriéndose al método de tirar grandes volúmenes de agua desde las alturas de una aeronave. 

"Podés utilizar el helicóptero; el mayor beneficio que te puede dar es humedecer la vegetación para que el fuego cuando llegue se retrase un poco en avanzar. Pero creer que se puede apagar el fuego con agua tirada desde un helicóptero o una aeronave, no es asi, porque cuando llega el agua casi que es vapor y si, absorbe calor, pero no es ni cerca lo que sería necesario para poder apagarlo con agua desde el aire", compartió el experto, que afirmó que incluso bajo una lluvia abundante se puede mantener el fuego, a raíz de la temperatura generada en el área. 

Sobre los incendios en Canelones, dijo que el más importante fue el de el Fortín de Santa Rosa, que ahora está controlado y se están realizando tareas de enfriamiento. Informó que según los registros de Bomberos, en el departamento no hubo ni afectación a viviendas ni a personas por el fuego. 

Manifestó que si bien actualmente no tienen una causa determinada, ni pruebas ni indicios del origen, se entiende desde la fuerza que la mayoría de estos incendios están "vinculados a la acción humana", principalmente "una acción descuidada y negligente".

"Estamos en un momento de prohibición de quemas al aire libre y la gente realiza fuegos, quemas ya sea para limpiar un predio, para quemar residuos o vegetación, en forma inconsciente. También puede haber algún caso que haya intencionalidad, pero nosotros no tenemos pruebas ni nada como para afirmarnos en eso, solo presunciones de que puede ser así", aseveró. 

"Por eso es importante que si alguien ve a alguien haciendo un fuego, nos avise inmediatamente al 911, lo antes posible, y nos dé la información necesaria para poder ubicar al responsable y poder tomar las acciones pertinentes", agregó.