En Perspectiva

Lo bueno por menos

Plan de Infraestructura: mejorar la calidad de las rutas con un mecanismo más eficaz

El Ministerio de Transporte prevé hacer modificaciones en el último tramo que lleva a la ciudad de Colonia por Ruta 1.

15.07.2022 13:59

Lectura: 4'

2022-07-15T13:59:00
Compartir en

Por En perspectiva

A inicios de julio, las autoridades del Poder Ejecutivo, entre ellas, el presidente Luis Lacalle Pou, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Isaac Alfie, y el ministro de Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero, presentaron el Plan de Infraestructura para el quinquenio.

Según una presentación previa a la realización de la conferencia de prensa, el gobierno invertirá US$ 905 millones en infraestructura solo en 2022. La mayor cifra si se compara a lo destinado en este periodo cuando se invirtió US$ 303 millones en 2020 y US$ 500 millones en 2021.

El gobierno informó que en el período 2020-2025 se harán diferentes obras en 7.692 kilómetros de un total de 8.833 kilómetros que componen la red de rutas nacionales. En esta línea, el Poder Ejecutivo señaló que se dividen en: 642 kilómetros de nuevas rutas, 2.610 kilómetros de cambios de standard y 4.440 kilómetros de recuperación de pavimento. A su vez, se invertirá en 227 puentes un monto de US$ 413 millones y US$ 118 millones en la creación de 100 nuevas rotondas en todo el país.

Para hablar sobre los detalles de esta planificación, el programa En Perspectiva que conduce el periodista Emiliano Cotelo dialogó con el titular del Ministerio de Obras Públicas (MTOP).

El secretario de Estado indicó que hay varios tipos de construcciones a nivel de rutas, que van desde el mantenimiento tradicional en aquellas carreteras que tienen la construcción adecuada dependiendo del tránsito y la carga que se transporte por allí. Luego también hay un cambio de standard, que es para aquellos caminos que estén construidos en tratamientos bituminosos doble para levantarle el nivel de ruta primaria y pasarlo a mezcla asfáltica con un espesor superior a los 8 cm.

“Nos brindan no solo un mejor pavimento y una mayor durabilidad, sino que cuando se interviene en este tipo de trabajos también se adecuan los anchos, las banquinas, incorporación de rotondas, mayor luminarias, que es un tema que nos preocupa porque hemos encontrado una red vial que no estaba acorde a lo que había sido el crecimiento de la producción nacional y el parque automotor. Eso va a cambiar significativamente la red vial y las condiciones que van a tener para el tránsito normal en estas rutas”, aseguró Falero.

Más adelante, el ministro de Transporte adelantó que están trabajando en un proyecto alternativo que es utilizar un tramo de la antigua Ruta 1 para convertir la actual ruta nacional que va de Riachuelo a Colonia (trazo que tiene la palmeras) y que sea jurisdicción departamental y no nacional, como lo es actualmente.

“Estamos trabajando en un proyecto alternativo que es utilizar la Ruta 1 vieja, posiblemente me traigan hoy el informe, y estamos en condiciones de poder derivar desde Riachuelo a Colonia por esa faja antigua y generar ahí la doble vía. Dejar el tramo como ruta de jurisdicción departamental porque tiene un comportamiento más urbano que jurisdicción nacional”, sostuvo.

Consultado sobre si las palmeras quedarían, Falero respondió que sí y que la ruta nacional iría por ese tramo anexo que igualmente llega hasta Colonia. En tanto, trazo que tiene a su costado un conjunto de palmeras pasaría a ser un acceso urbano a la ciudad. “La Ruta 1 la vamos a licitar este segundo semestre, la vamos a adjudicar sobre fin de año y empezaremos en febrero-marzo a construirla y tiene una duración de 18 meses”, informó.

Además, anunció que el ministerio está licitando para sacar todos los árboles de las rutas porque en otras épocas habrá sido muy bueno, pero no podemos mantener al costado de la faja los eucaliptos que son un peligro.

Finalmente, sobre los Contratos de Rehabilitación, Mantenimiento y Financiación (Cremaf), el jerarca de gobierno los comparo con los Proyectos Públicos Privados (PPP), reconoció que tienen “cierta similitud”, pero destacó que este formato tiene un financiamiento “más corto” (se pasa de 20 años a 10), los trámites de “garantías y aseguradores son menores”, y se reducen los costos constructivos.

“Eso significa que es una herramienta más segura, más garantista, pero con menores costos de financiamiento en sí mismo y eso ha sido favorable”, concluyó.