Donald Trump se convirtió este martes en el primer expresidente de Estados Unidos en enfrentar cargos penales.
El político y empresario, de 76 años, se presentó ante una corte de Manhattan, Nueva York, donde el juez le informó de 34 cargos que se le imputan y que están relacionados con el pago por el silencio de una exactriz porno, con la que supuestamente mantuvo una relación.
El pago en sí mismo no sería ilegal, pero Trump presuntamente lo registró como un gasto de sus negocios. En Nueva York, falsificar información relativa a los negocios es ilegal.
Luego de más de una hora de procedimientos, Trump quedó en libertad bajo fianza. Más adelante viajó a su residencia en Mar-a-Lago y ofreció un discurso en el que arremetió contra el fiscal que lleva su caso.
En la audiencia, el expresidente se declaró “no culpable” de los 34 cargos.
Su abogado principal, Joe Tacopina, dijo que la acusación muestra “que el Estado de derecho murió” en ese país.
“Si bien nadie está por encima de la ley, nadie está por debajo de ella tampoco. Y si el nombre de este hombre no fuera Donald J. Trump, no habría el escenario en el que todos estamos aquí hoy”, agregó.
El caso es rechazado por el exmandatario, quien considera que está motivado políticamente y es parte de una “caza de brujas” en su contra para coartar sus aspiraciones presidenciales en la elección de 2024.
Este miércoles, la conductora de En perspectiva Romina Andrioli conversó con Gustavo Calvo, conductor de La hora Global, analista internacional.
Calvo señaló que algunos periódicos de Miami calificaron los hechos como “la acusación soñada de la campaña de Trump”.
“Para muchos, anoche Trump comenzó su campaña electoral con una victimización que le vino a medida. Antes de este hecho, tenía 44% de aprobación en lo que sería un esbozo de las primarias republicanas, pero según algunos sondeos del noreste y el este ya rozaba el 56%. Alineó a todo el Partido Republicano detrás de él”, reflexionó el especialista.
Y agregó: “Anoche Trump empezó a ganar las primarias y, además, se demostró que tiene una llegada a la gente que sigue vigente. Estaba perdiendo peso en el Partido Republicano y esto lo devuelve al primer plano. Con toda una corte de líderes y jerarquías intermedias del partido apoyándolo”.
