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Abogado Decia: “Carrasco no puede fingir demencia y decir que no sabía lo que hacía Basso”

El denunciante añadió una nueva causa por la adulteración de un documento privado, con penas de hasta cinco años de penitenciaría.

04.02.2025 17:55

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2025-02-04T17:55:00
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Por En perspectiva

Una nueva denuncia se sumó el lunes al caso de Conexión Ganadera. Juan Pablo Decia, abogado de un grupo de ahorristas perjudicados por la situación de la empresa, había afirmado que existen contratos que llevan la firma de uno de sus fundadores, Gustavo Basso, fechados después de su muerte.

En declaraciones a El Observador, el abogado citó el caso de uno de los contratos, que tiene fecha del 17 de diciembre de 2024, días después de la muerte de Basso en un accidente de tránsito, el 28 de noviembre.

Se trata de un contrato por el que un particular invirtió más de US$ 100 mil en la empresa. Decia dijo a El Observador que ese contrato es prueba de que se cometió falsificación de documento privado, además de la estafa y apropiación indebida, que son los delitos por los que ya denunció a Carrasco y a otros representantes de la empresa.

Sin embargo, el contrato divulgado presenta un código QR, con el que se puede acceder a la verificación de la firma digital. 

Según se describe allí, si bien el documento del contrato signado por las partes lleva en su encabezado como fecha el 17 de diciembre, la firma electrónica del documento por parte de Basso fue el día 15 de noviembre a la hora 9:13. Ese mismo día también firmó de forma digital Pablo Carrasco, el otro socio de Conexión Ganadera.

Montevideo Portal informó este martes —luego de la realización de la entrevista— sobre la fecha de la validación de la firma electrónica de Basso. Sin embargo, durante la charla con En perspectiva, el periodista Emiliano Cotelo había planteado el tema como una posible hipótesis, previo a conocerse los detalles, lo que llevó al abogado a señalar que de cualquier modo se incurrió en “un enorme desorden administrativo”.

En la entrevista con En perspectiva, Decia abordó los detalles del caso y afirmó que se trata de una “estafa sostenida y apropiación indebida”. Asimismo, apuntó a que Carrasco “no puede fingir demencia diciendo que no sabía lo que hacía Basso cuando era el tomador interno del ganado de Conexión Ganadera”.

“La lectura que hacemos nosotros tiene varias puntas. Es algo que tiene que ver con un enorme desorden administrativo y también con un instrumento, ya que cuando uno está inmerso en una maniobra de estas características —como la que denunciamos y entendemos que ocurrió acá, que es una estafa sostenida a lo largo del tiempo y un delito de apropiación indebida clarísimo—, la firma de un contrato por una persona que no está es una forma de viabilizar algo que es más grande”, explicó Decia.

El periodista Emiliano Cotelo apuntó a que una lectura posible es que los textos de los contratos modelo ya estuvieran preparados, con una cantidad de copias ya prontas y firmadas que se van usando y rellenando cuando llega un inversor en particular. El abogado respondió que “seguramente esa va a ser la lectura que ensayen los abogados de la empresa para justificar algo que no tiene ningún tipo de justificación válida para el inversor”, ya que aún si fuera el caso, “no tendría que haberse usado”. Más adelante en la entrevista, Decia sostuvo que “en inversiones de estas características” no debería haber “contratos prehechos”.

“Lo que revela esto es que había una enorme desprolijidad administrativa, algo que no condice con el prestigio que tenía la empresa, con cómo se presentaba hacia sus inversores, quienes depositaban su confianza en una empresa que aparentaba ser sólida desde todo punto de vista”, sostuvo Decia, y destacó que es “una perla más en un cúmulo de irregularidades que naturalmente tendrán que ser analizadas por la Fiscalía y el Poder Judicial para ver qué alcance tienen”.

Decia comentó que ampliará la denuncia como “otro hecho más de apariencia delictiva”. “En este caso, sería la adulteración de un documento privado que tiene una pena que oscila entre los cuatro meses de prisión y los cinco años de penitenciaría por falsificación de una firma”, detalló. A su vez, indicó que hay un agregado que “no es menor”, y es que “se está falsificando la firma de una persona que habría fallecido el 28 de noviembre.

El abogado señaló que en el contrato “se deja expresamente consignado que el administrador, o sea Gustavo Basso, se reúne previo a la firma de un contrato”, y que en el acto mismo del acuerdo le explica al inversor “el alcance y el contenido de lo que se apresta a firmar”.

El contenido de ese texto implica que Basso tendría que haber estado presente en la instancia de firma para explicarle “no solamente al inversor, sino que al tomador interno, o sea, su socio Pablo Carrasco”, señaló Decia, lo cual significaría que Carrasco le estaría explicando el alcance de un contrato a una persona que está fallecida, y aseguró que está dicho en el contrato.

El abogado opinó que “cuando uno empieza a escarbar y ve que en el contrato hay una cláusula de consentimiento informado donde el administrador, Gustavo Basso, que murió hace 20 días, le informa al cliente que el negocio consiste en determinada inversión, ahí ya parece que se está pasando un poco del desorden administrativo y se acerca más a una estafa flagrante y sostenida a cabo del tiempo”, causa del añadido a la denuncia de Decia.

Las personas denunciadas abarcan a Pablo Carrasco,  Ana Iewdiukow (esposa de Carrasco) y Daniela Cabral (esposa de Basso). 

Decia sentenció que además de los tres denunciados, tanto los gerentes como los funcionarios administrativos involucrados “absolutamente deberían” rendir cuentas a la Justicia y “explicar por qué hay un enorme desfasaje entre las inversiones que recibían para la compra de ganado y el ganado que hay”.

“Carrasco no puede fingir demencia diciendo que no sabía lo que hacía Basso cuando era el tomador interno del ganado de Conexión Ganadera. Cuando había inversiones por US$ 400 millones, deberían haber ganado por 400 millones de dólares, aunque en realidad había con suerte US$ 100 millones, que hay que ver si realmente los hay, aunque lamentablemente yo me aventuraría a decir que no”, estimó el abogado.

Decia concluyó que “lo que hay que hacer ahora, urgente, es mapear ese ganado, ir a los campos con el Ministerio de Ganadería, hacer las lecturas de trazabilidad, ver qué ganado hay, de qué categoría es y a nombre de quién está, y a partir de ahí trabajar rápidamente en una solución porque el crédito de la empresa se va a cortar, la operativa se va a resentir y si se resiente la operativa, el ganado se perjudica y se puede morir y pierde valor”.