El Gobierno uruguayo fue el último de América del Sur que dio el visto bueno para la aprobación de partidos internacionales en su territorio. Lo hizo el mismo día en que Argentina también lo autorizó y sobre el plazo límite que planteó la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).

La Conmebol adelantó la noticia el martes de noche y horas después lo borró a pedido de las autoridades uruguayas, que todavía no habían oficializado la noticia.

“El Gobierno de Uruguay aprobó los protocolos de concentración sanitaria presentados por Conmebol para la disputa de partidos de la Copa Libertadores y la Sudamericana 2020. ¡Juntos creemos en grande!”, publicó en sus redes la entidad rectora del fútbol sudamericana, aunque luego borró el mensaje.

El Ministerio de Salud Pública impuso condiciones muy estrictas para el cumplimiento del protocolo y aún no hizo oficial la decisión, pero ya está tomada. Los clubes lo saben y ya tienen la tranquilidad de que no tendrán que cambiar de país para ejercer su localía.

También el martes el Gobierno argentino dio el visto bueno para la disputa de partidos en su territorio, después de una gran presión de los equipos de ese país y de ajustes en el protocolo.