A las 20:00 horas de este jueves, Franco Roncadelli saldrá a la cancha central del Carrasco Lawn Tennis Club para intentar llegar a los cuartos de final del Uruguay Open.
El tenista surgido en el Náutico y desarrollado en el club sede del torneo, se las verá ante el chileno Tomas Barrios Vera, octavo cabeza de serie, para intentar meterse entre los ocho mejores, algo que no logra un tenista local desde la participación de Martín Cuevas en la edición de 2018.
Luego de caer 4-6 y 4-6 en dobles junto a Ignacio Carou ante el peruano Alexander Merino y el alemán Christophr Negritu, Roncadelli afirmó que de sólo pensar en jugar en segunda ronda se le “eriza la piel”. “Siempre fue mi sueño, pero a medida que pasó el tiempo se fue tornando en un objetivo porque sentía que mi tenis iba mejorando y yo podía ser capaz de ganar acá”, añadió a Montevideo Portal.
El uruguayo recordó que en 2022 perdió 5-7 y 2-6 ante el holandés Mark Houkes, y al año siguiente 7-5, 3-6 y 2-6 contra el peruano Juan Pablo Varillas, “pero con el sentimiento de estar jugando un poco mejor”.
“El año pasado, en cambio, llegué con muchas expectativas porque había tenido una gran temporada, y eso me jugó en contra y perdí 3-6 y 5-7 ante Gastao Elías. En este año estuvo todo el calendario jugando en el circuito de challengers y entonces todo se me hizo más normal”, siguió.
El uruguayo señaló que se siente un tenista mucho más completo: “De hecho,no sentí que haya realizado nada diferente, sino más de lo que vengo haciendo habitualmente. Me pude demostrar a mí mismo que soy capaz de estas cosas y también a mis amigos y a la gente de Uruguay, porque hacía tiempo que no podía jugar partidos acá”.
El cambio de temporada
Franco Roncadelli tuvo un 2024 muy bueno, sumando títulos en la serie de torneos de ITF (Futures), y en 2025 llegó a semifinales y final en la serie challenger. Dos buenos años, en uno con trofeos, pero en el otro consolidando su crecimiento y manteniendo los puntos ganados en 2024.
“El año pasado salté del 600 al 350 del mundo en dos meses. Fue muy lindo, con muchas cosas positivas, y en esta por primera vez en mi carrera me tocó defender muchos puntos, con la presión que eso significa. Tuve que madurar mucho para poder disputar los challengers a buen nivel”, dijo.
“Además me fui a vivir a Argentina para seguir evolucionando, y aunque en el ranking no se notan tanto esos cambios, porque hasta ahora más o menos son los mismos puntos, pero defendidos a mejor nivel. Estoy feliz por la forma que vengo jugando este año, y aún queda terminar este torneo y uno más”, señaló el primer tenista uruguayo.
De mudanza
Ir a vivir a Argentina le dio la oportunidad de contactarse con más personas vinculadas al tenis, desde otros tenistas, hasta preparadores físicos o kinesiólogos, hasta la chance de trabajar con jugadores que ya tienen puntos de ATP entre los 200 mejores del mundo.
“Sentía que necesitaba dar ese pasito de meterme un poco más en ese mundo del tenis del día a día. Sentir otra vez me ayudó, pese a que estoy recontra agradecido de Bebe Pérez Cassarino, quien he trabajado mil años. Quería tener la posibilidad de, en caso de arrepentirme, que fuera luego de haberlo intentado, y no por no haberlo hecho. Siento que tengo mucho margen para mejorar”, comentó.
En busca de los cuartos de final
Franco Roncadelli señaló que el triunfo 6-2 y 6-4 sobre Genaro Olivieri “fue una locura”. “Me puse muy tenso porque tenía muchas ganas de terminar el partido con triunfo y al mismo tiempo se venía la lluvia. Era todo muy raro”, indicó.
“Tuve tres match points y lo gané recién en el cuarto. Y apenas salimos de la cancha se cayó el mundo por la tormenta. Lo bueno es que tuve libre de individuales este miércoles, y sólo jugué dobles, así que pude relajarme un poco pensando en el partido contra [Tomás] Barrios Vera”, ahondó.
Ahora, el 336º de ATP saldrá a la cancha no antes de las 20:00 horas para medirse ante el chileno, 111 del mundo y ex 93 por primera vez en su carrera.
Por igualar a Martín Cuevas
El último tenista uruguayo en llegar a cuartos de final del Uruguay Open fue Bebu Cuevas, quien en la edición de 2018 derrotó sucesivamente en primera ronda 7-6(7) y 7-6(5) al español Carlos Taberner, y luego 4-6, 7-5 y 7-5 al brasileño Thiago Monteiro, quinto cabeza de serie.
Martín cayó en cuartos de final 3-6 y 4-6 ante el español Mario Vilella Martínez, quien casualmente había dado la gran sorpresa del torneo al derrotar 6-2 y 6-2 en primera ronda a Pablo Cuevas, primer cabeza de serie y 65 del mundo en ese momento.