Tenis: Radu Albot, juega el Punta del Este Open pensando en la Davis ante Uruguay

Radu Albot nació el 11 de noviembre de 1989 en Chisianu, la capital de Moldavia, con una población de poco menos de un millón de habitantes.

Ocupa el puesto 130 del mundo esta semana, en la que forma parte de la legión de grandes tenistas que participan del Punta del Este Open, y fue 39 del mundo en 2019, año en que ganó su único título de ATP, en Delray Bech.

Llegó por primera vez a disputar un torneo del circuito profesional en Sudamérica como parte de la preparación del duelo que por Copa Davis tendrá el primer fin de semana de febrero ante Uruguay en el Carrasco Lawn Tennis Club.

Mientras se deslumbra con las bellezas de un país y una ciudad que le quedaban “lejos y desconocida”, debutó con un gran triunfo en el torneo que se juega en el Cantegril Country Club.

Le ganó en primera ronda 64 62 al argentino Genaro Olivieri, campeón del Uruguay Open de 2022, y este miércoles jugará ante el octavo favorito, el italiana Luciano Dardderi, 128 del ranking.

“Sabía que mi rival en el debut era muy difícil, conocía que le gustaba mucho jugar sobre esta superficie y estudié todas sus estadísticas. Estaba listo para jugar un partido intenso, pero honestamente creo que él no pudo mostrar todo lo bien que juega. Pero Genaro es argentino, es sudamericano, por tanto, esta superficie es su preferida y creció en ella”, comenzó diciendo Albot.

“A mí me gusta jugar sobre polvo de ladrillo, aunque no es mi superficie favorita. Se sabe que para poder estar a nivel en canchas lentas hay que estar preparado físicamente, tener paciencia, que hay que construir cada punto porque son largos. Tenía una estrategia para enfrentarlo y creo que funcionó”, agregó.

Albot ha jugado torneos en Centroamérica y algunos torneos juveniles en el norte de Sudamérica, pero nunca había llegado “tan abajo”, como dice entre risas.

“Nunca había venido a Sudamérica a jugar un torneo de ATP. Generalmente en esta época suelo jugar en Estados Unidos o en Europa, pero con la excusa de la Copa Davis pude venir antes para adaptarme al clima, la diferencia de hora y las canchas porque realmente hace calor”, señaló el moldavo.

“Punta del Este es un lugar hermoso. Es tiempo de vacaciones y hay un ambiente muy relajado. Tengo la suerte de estar en un hotel muy céntrico, rodeado de playas, y se puede pasar buenos momentos en los atardeceres. Por otra parte, el club es increíble, es grande, tenemos muchas canchas para entrenar y está muy bien organizado, cuidando cada detalle. Me gusta mucho estar aquí”, describió acerca de su primera experiencia en esta ciudad.

La Davis

“Lo primero que pensé cuando vi que nos tocaba jugar ante Uruguay, fue que es muy lejos y que no era tal vez el rival más conveniente, pero así es la Copa Davis. Tenés que viajar mucho e ir a muchos países. Igualmente me parece que no fue un sorteo tan malo. Es un lindo lugar, y tengo la facilidad de poder participar en este torneo previo. Con el equipo estamos entrenando mucho más allá de lo que suceda en cuanto mis resultados en Punta del Este”, recordó Albot.

Moldavia y Uruguay tienen poblaciones similares, de poco más de tres millones de habitantes, y en ambos países, a la hora de elegir un deporte para practicar, los jóvenes prefieren en fútbol.

Sin embargo, Radu Albot empezó a jugar al tenis poque su padre vio unos partidos por televisión. Desde entonces su carrera fue ascendente. Se transformó en el primer moldavo en ganar un torneo ATP, luego el primero en ser top 50, y sigue generando un camino para quienes deseen seguirlo en su país.

“Soy muy fanático del fútbol, como la mayoría en mi país. Estoy siguiendo muy de cerca a la selección nacional, que está muy cerca de clasificar a la Eurocopa. Conozco a varios de ellos, pero juego al tenis porque mi padre vio unos partidos por televisión y se entusiasmó”, explicó.

Se transformó en una leyenda del tenis moldavo, quebrando records y prejuicios, y se siente muy orgulloso de sus logros. Destaca el esfuerzo que significa jugar al tenis, y espera que muchos jóvenes puedan seguir ese camino.

“Soy feliz cuando me dicen que de alguna forma siguen mi carrera y cada vez que estoy en Moldavia organizo clínicas para ellos. Me preguntan muchas cosas y estoy mucho tiempo con ellos y sus padres. Trato de devolverle a la generación más joven todo lo que el tenis me dio, y también les cuento lo difícil que es este deporte, pero al mismo tiempo intento motivarlos”, afirmó Albot, para quien la vida cambió muchísimo durante la pandemia de Covid 19 ya que en ese tiempo nació su hija menor.

“Traté de jugar lo más posible, pero al mismo como teníamos semanas libres pude disfrutar mucho de ella. Me gusta mucho estar en casa, por eso cuando todo el tema Covid fue disminuyendo, me costó volver al ritmo anterior, pero de a poco lo logré”, señaló.

La semana próxima ya no estará en una ciudad de vacaciones y en la playa sino en semana de Copa Davis. “Sabemos que en Sudamérica se vive intensamente, con mucha pasión de los aficionados. Esperamos tener la tribuna en contra, pero tenemos mucha confianza en el equipo. Sabemos los ranking de los uruguayos, los vimos jugar durante la ronda clasificatoria acá en el Punta del Este Open, pudimos estudiar bastante su juego, y sabemos que será una serie dura. Al final todo se resume en tratar de dar lo mejor y entonces los resultados podrán acompañarnos”, culminó diciendo Radu Albot.