Una curiosa situación se vivió este martes en el sorteo de jueces para el partido que cerrará los cuartos de final de la Copa Argentina el miércoles de la semana que viene. Rosario Central y Boca Juniors se enfrentarán en Córdoba y es inevitable el recuerdo de la final del año pasado, cuando los xeneizes ganaron 2-0 con un gol de penal mal pitado y un segundo tanto en offside. Hubo otros fallos de Diego Ceballos que perjudicaron notoriamente al conjunto canalla, por lo que ahora su dirigencia encendió la luz de alerta de una manera poco habitual.

Luciano Cefaratti, vicepresidente de Rosario Central, se presentó en el sorteo de jueces y pidió tocar las bolillas a los efectos de comprobar que no hubiese ninguna irregularidad. Rubén Mattiauda, vocal de la Comisión de Árbitros, aceptó el pedido aunque no le gustó, y Cefaratti argumentó: “está bien y lo comprendo, pero quien se quemó con Boca, ve un partido y llora”. Finalmente el sorteado fue Patricio Loustau.