River Plate prepara su partido del domingo ante Nacional con un cronograma de trabajos distinto al planificado por el cuerpo técnico que encabeza Guillermo Almada, dado que el plantel decidió suspender la actividad que se había previsto para la tarde del martes luego de la práctica matutina por haberes impagos.

 

Los futbolistas sí fueron, pero a hacer trabajos regenerativos y a informar de su decisión de no entrenar en el club, y con la idea de posiblemente de no concentrar de cara al partido que se jugará el domingo a las 15 horas en el Estadio Centenario, en el marco de la cuarta fecha del Torneo Apertura.

Esta sorpresiva medida de los jugadores darseneros se debe a que, si no cobran antes del próximo miércoles, llegarán a tres meses sin cobrar. Por su parte, la deuda con el entrenador es de casi cuatro.

La dirigencia confía en conseguir los recursos para que concentre el plantel, que volvió al complejo que el club tiene en Colón en la mañana del miércoles para seguir trabajando. De no cobrar al menos uno de los casi tres meses que tienen atrasados, los dirigidos por Almada no concentrarán.