Peñarol: “Da gusto ir todos los días a Los Aromos a entrenar”, destacó Damián Musto

“Uno siempre quiere jugar y cree que está siempre para jugar, pero la realidad es que cuando llegué el equipo encontró el funcionamiento y se dieron los resultados. Por características creo que puedo pelear más el puesto con Jesús (Trindade) que con el Mota (Gargano), que es un poco más de soltarse, llegar y ser el nexo entre el medio y los delanteros”, contó Damián Musto al programa ‘100% Deporte’ de Sport 890.

“Uno trata de dar su mejor versión todos los días, de entrenarse al máximo y de empujar desde donde le toque, pero la realidad es que Jesús está en un grandísimo nivel. No lo tenía del todo visto y cuando vine me encontré con un jugador espectacular que me gusta mucho. Más allá de que nos toca pelear un puesto, tenemos una relación espectacular y estamos todos para el bien de Peñarol”, agregó el mediocampista argentino.

“Entiendo que uno a veces la tiene que pelear de atrás y hay que estar ahí todos los días picando y picando para que, cuando aparezca el hueco y la posibilidad, la pueda aprovechar. Esto es así y siempre ha sido así. Lo tomamos todos de esa manera y haciendo eso elevamos el nivel del grupo”, añadió el volante de 34 años recién cumplidos, quien lleva nueve partidos jugados y se mostró “muy cómodo y feliz” con su vida en Uruguay, donde se encuentra con su esposa “disfrutando el día a día a pleno”.

Los campos de juego y la supervivencia del jugador uruguayo

Consultado por las condiciones del fútbol uruguayo en comparación con otros países donde jugó, dijo que “la mayor diferencia y lo primero que se puede notar es en los campos de juego”. “Es habituarse nuevamente a los campos donde uno jugaba cuando salió, y no todos están en las mismas condiciones. Eso hace que el juego por momentos se haga más lento o se intente jugar directo, salteando líneas, porque es difícil construir desde abajo si la superficie no está de la mejor manera”, opinó.

“En Uruguay salen jugadores por esa supervivencia y esa forma de imponerse ante la adversidad que han tenido siempre. Están acostumbrados a tomarlo de manera natural. En lo personal creo que lo ideal sería que estuvieran todos los campos de la mejor manera y que lo exija la federación, aunque es difícil porque requiere de dinero y muchas veces los clubes no tienen. Es parte de la adaptación y uno debe amoldarse a eso”, dijo.

“Lo más lindo es estar en el club que estoy y en el grupo que hemos formado, que es espectacular. Da gusto ir todos los días a Los Aromos a entrenar y compartir con el grupo que estoy compartiendo”, destacó Musto, quien también se refirió a dos de las jóvenes promesas que tiene Peñarol en su plantel.

Las condiciones de Torres y Álvarez Martínez

Consultado por su compañero de equipo Facundo Torres, quien sigue sumando minutos oficiales en la selección uruguaya, dijo que no lo sorprendió “por las condiciones y la personalidad que tiene para hacerse cargo del juego”. “Lo más lindo es ver que lo pueda seguir haciendo a ese nivel, con la presión que puede llegar a tener jugar una Copa América”, indicó.

“No debe ser tan simple entrar en un grupo nuevo. La felicidad más grande es verlo hacer lo que le vemos hacer todos los días. Nosotros, que lo tenemos ahí cerquita, lo tratamos de cuidar y proteger, y que esté feliz. Entrar como lo hizo y con la soltura que entró, habla de que tiene un potencial muy grande. Le dio más profundidad y fue metiendo cada vez más cerca de su arco a Chile”, opinó.

Sobre otro joven compañero como Agustín Álvarez Martínez, dijo que “tiene mucho potencial y está recontra ubicado desde la cabeza”. “Lo conocí acá en Uruguay y lo que más le admiro es la madurez. Si bien es súper joven, es recontra maduro y trabaja mucho, incluso cuando no tenemos la pelota. Es algo que ha ido incorporando y se lo van a pedir en cualquier lugar del mundo. Si suma ese sacrifico a su olfato goleador, estamos en presencia de un jugador que tiene mucho potencial”, concluyó.