El partido más violento del fin de semana tuvo lugar este domingo en Paraguay, donde por la Liga Luqueña no pudieron terminar su compromiso 6 de Enero y Teniente Herreros Bueno en la cancha del primero, ubicada en el suburbio luqueño de Costa Sosa.

Corrían apenas 11 minutos cuando un jugador del equipo visitante le dio un planchazo en la espalda a un rival que estaba de espalda y cayendo. Sin intención alguna de jugar la pelota, la cobarde agresión del defensor obligó al árbitro a expulsarlo.

Más tarde, ya con el partido 2-2, hubo incidentes que comenzaron dentro del campo y terminaron fuera, y llevaron a los jueces a determinar la suspensión del encuentro.

Por la misma liga, tampoco pudo completarse el duelo entre 20 de Julio y 31 de Agosto. Un jugador del equipo visitante, luego de un gol anulado, se abalanzó sobre el árbitro y apareció uno de sus asistentes (César Ferreira) para defenderlo usando un banderín, lo que le costó quedar detenido.