En noviembre del 2009, el volante tricolor Matías Cabrera perdió el conocimiento al chocar su cabeza con la de su compañero Alejandro Prieto en un entrenamiento. Cuando viajaba a la sociedad, Cabrera sufrió una convulsión que obligó a que se le realizara una urgente intervención quirúrgica.

Como consecuencia de este grave incidente, en aquella ocasión a Cabrera se le realizó una intervención quirúrgica para reducir el gran hematoma que le produjo la fractura de cráneo y un pequeño coágulo, producto del golpe con su compañero.

El jugador estuvo en el CTI de la Asociación Española pero salió de peligro y logró recuperarse lentamente, volviendo al fútbol meses después pero sin abandonar nunca un casco especial para protegerse la cabeza.

Ayer, durante el encuentro que disputaban América y Nacional en el estadio, Cabrera recibió un fuerte pelotazo en el cráneo. Según reportó el periodista Martín Charquero en Sarandí, al regresar a los vestuarios, tras finalizar el partido, Cabrera estaba mareado y no recordaba bien la jugada ni reconocía a algunos de sus compañeros.

Ante el miedo de que se resintiera de su lesión, el club decidió trasladar a Cabrera a la Sociedad Española para realizarle un chequeo. Según confirmaron desde la institución a Montevideo Portal, el jugador quedó internado durante toda la noche y fue dado de alta en la tarde del jueves.